Mi puntuación: Sobresaliente.
Primero de todo me gustaría destacar la tremenda ambientación que esconden las páginas de este libro.
Toda la atmósfera que envuelve a la historia y a los personajes es, desde el principio, una delicia.
Dentro de la trama se van sucediendo los años y los acontecimientos con una narración pausada que desconoce las prisas. Hay varios marcos temporales que se van entremezclando capítulo a capítulo. Pasado y futuro entretejidos hasta llegar al súmmum que desencadena un gran cambio para el Circo.
Los personajes y el desarrollo del camino que deben recorrer los protagonistas principales son gloria pura trasladada al papel. Fuertes y frágiles. Poderosos y sensibles. Hay una dulzura en el trato que da la autora a cada momento y personaje que debo insistir en la mágica atmósfera que rodea en todo momento a esta historia.
Me deshago en cumplidos porque el libro, página a página, me deshizo a mí en lujurioso disfrute. Inevitable.
Dicho esto, me gustaría hacer una recomendación: NO LEÁIS LA SINOPSIS de la contraportada.
Como lectora a la que le gusta descubrir los detalles importantes de una historia leyéndola y no antes, no alcanzo a comprender cómo se suelta en una sinopsis sin pudor ninguno un dato que no se desvela hasta la página cuatrocientos y pico y que, además, conlleva una revelación importantísima para la historia. ¿Por qué hacéis eso editoriales? En esta ocasión llevaba unas trescientas páginas cuando accidentalmente leí una frase en concreto de la contraportada que me chafó un descubrimiento hasta ese momento desconocido. Y no entiendo qué necesidad había de soltarlo en la sinopsis. No-lo-entiendo. Si queréis leer este libro descubriendo las cosas de la mano de los protagonistas y a la vez que ellos, la sinopsis ni la toquéis.
Vamos que
no tenía ni pajolera idea de que el duelo era a muerte y que la "partida" no terminaba hasta que moría uno de los dos. Y al leer eso en la sinopsis... |