Hola, es un placer, llevo tiempo leyendo comentarios aquí y allá hasta que por fin decidí registrarme. Ay, la vagancia
Refloto el hilo porque tenía pendiente desde hace años leer "El Golem" y ayer mismo lo acabé. Creo que prácticamente todos y cada uno de los puntos de vista aquí vertidos pueden tener su parte de razón. Sin duda es una novela relativamente compleja, sujeta a diferentes interpretaciones. Su tempo narrativo es, en general, pausado y creo que muy apropiado para lo que Meyrink nos está contando. Literariamente, por tanto, a mí no se me hizo pesada en ningún momento. No es una prosa excelsa pero sí bastante buena; como varios comentásteis en su momento, la descripción minuciosa, opresiva y fascinante de la Judería de Praga es uno de los puntos fuertes de la obra. Todo gira en torno a ello.
El tratamiento de los personajes, en general, me parece correcto. Pernath tiene interés desde el mismo instante que comienza a "desdoblarse" y Hillel resulta tan fascinante como enigmático.
A Wassertrum, el usurero, se le coge pronto una antipatía lo suficientemente grande como para no desearle una vida larga y próspera.
Mejor el final inesperado, con la lima que le atraviesa la garganta, al veneno que progresivamente acababa con su vida. |
El final tenía que ser algo así: absolutamente surrealista y, como es la obra en sí, ambiguo y con diversas interpretaciones. No podría decir que he entendido EL final, en tanto que puede haber varios. Cuando cierras el libro hay un poso, tienes la necesidad de repensar determinadas situaciones leídas. Y eso habla muy bien de la obra de Meyrink.
Creo que, a pesar de ciertos momentos de confusión, propiciados intencionadamente por el onirismo que trata de plasmar el autor, la obra está bien hilada. Desde luego no es un libro que vaya a contentar a todo el mundo, pero sí merece la pena al menos el intento de leerlo.
Que uno tenga equivocadas referencias sobre El Golem y que dicha criatura pueda protagonizar una sangrienta venganza machacando cráneos por las calles de la Judería no hace sino causar mayor sorpresa -desagrado en algunos casos, leo y conozco- sobre lo que se encuentra a medida que avanza la lectura. En mi caso ha resultado del todo positivo el toparme con lo que no esperaba.
¿Es una obra maestra? Como siempre es muy subjetivo esto. Para mí no llega a serlo. Sí veo una lectura muy interesante que, como he dicho, deja un poso notable al acabarlo y eso siempre habla bien de un libro. Meyrink logra una gran ambientación sugestiva y onírica dentro de una historia en la que no hay terror alguno y sí, por momentos, situaciones inquietantes, caóticas y claustrofóbicas. Saldo mi cuenta pendiente y satisfecho por ello. Un libro que hay que leer.