Terminado. Me ha parecido un auténtico novelón, llegándome a fascinar en algunos momentos, sobre todo durante los juicios. Tras comprobar que el autor, Roberto Santiago, no tiene formación en derecho (es director de cine y guionista) aún le doy más mérito, ya que la tarea de documentación que tiene que haber afrontado en relación al sistema judicial español, los entresijos de los juicios, los procesos de instrucción de los sumarios, etc. me parece realmente titánica.
Por supuesto una vez hecha esta tarea de documentación el otro gran mérito del autor, como dije en mi comentario anterior es haber creado una historia adictiva y unos personajes con fuerza (sobre todo la carismática protagonista). Solo hay uno de ellos (el teniente Moncada) al que no he terminado de cogerle el punto y comprender del todo sus motivaciones, pero los demás son muy buenos (los jueces son la caña
). La novela tiene un buen ritmo, y suceden muchísimas cosas, que a nadie le eche para atrás lo de “thriller judicial” porque el entretenimiento está asegurado.
El final me parece muy bueno y habría sido redondo de no ser por lo que pongo es este spoiler (ojo no abrir sin terminar la novela):
El giro final cuando Ana le desvela a Santonja la reunión que Concha y Sofía piensan mantener con el socio de este, y le propone un trato con una gran compensación económica para evitarlo me parece buenísimo. En cambio, la confesión sobre el intento de asesinato de Ana que hace Santonja en esa misma conversación me parece peliculera e infantil, y por supuesto no acorde con el tono realista que se mantiene durante toda la extensión de la novela. De hecho cuando leí la confesión pensé: “Espero que no me salga ahora con el truco de que Ana llevaba una grabadora…” Pues justo! |
No obstante esto no empaña el resultado global, que es una
brillantísima novela (ya le hubiera gustado escribirla al mismo John Grisham). Mi mejor lectura en lo que va de año. Me encanta descubrir este tipo de lecturas para recomendar a todo el mundo.
Un
9,5!