Pues lleva una de repuesto, que como te pase como a mí te quedas sin comprar ni subir al bus. Cuando fui a ponérmela me quedé con una tira en la mano y la otra sujeta por un solo punto . Que sí, que le haré un apaño para poder usarla, pero fíate tú de la mascarilla de regalo de la posturitas bocazas.
¡Ah! Y si la llevas al hospital, te darán una quirúrgica para ponerte encima, porque es de las que no protege hacia afuera. Muy útil, ya te digo.
Y la salida de la Cuarentena va ser pa verla desde el balcón, desde luego. Parece que ya está todo sin problemas, a juntarse y terracear, ni acordarse de las palizas que llevan en el cuerpo los sanitarios, ni cómo han quedado las residencias de tercera edad, ni que los Centros de Salud están a la cuarta pregunta de personal y recursos... hala, a reservar casa rural para agosto y a tomar el sol en la playa todos juntitos.