Lo terminé. No me ha gustado casi nada. La novela es principalmente una historia romántica, la típica de un amor predestinado, tan grande que supera todos los obstaculos, en este caso las barreras del tiempo. Demasiado empalagosa para mi gusto. El romanticismo, como el picante, me gusta en su justa medida, si se pasa de un punto determinado, ya no lo trago.
Como novela de viajes en el tiempo también decepciona, no aporta nada nuevo, ya comenté que el modo de viajar me parecía infantil.
El protagonista Richard me ha ido resultando cada vez mas cargante. Es un flojo, un quejica y un llorón. Insufrible.
Del final
lo malo que tiene es sabemos como acaba el libro desde el principio. Por las palabras del hermano deducimos que Richard ha muerto con lo que el destino de Elise, que también conocemos pronto, se mantendrá inalterable. El detalle de la moneda encontrada que precipita el final, sí que me ha gustado. Algo es algo |