Semidioses (Microrrelato)

[Cualquiera]

Semidioses


―¡Bua! ¡Buaaaa!
―Bien que los imitó… ¡¿A qué esperas para callarlo?! ―grita desde la entrada el marido.
―Rato de no saber de ti… ―sorpresa responde la esposa.
―Ya debería estar saltando por ahí, con los chicos, ¿no crees?
―Y sin embargo permanece a mi lado… ¿No es hermoso?
―Tú, sobre todo tú…―dijo cercándola―. No hay modo de que desistas, ¿eh?
―Es tan chiquito…
―Tamaño dinosaurio, diría… ―murmuró con asco, desechando que aquel bicho tuviera algo de él―. ¿Por qué no le sacas a la luz?
―Aún me necesita… ―suspira temblorosa, al tiempo que se echa junto al bebé―. De la madre, de mis pechos…
―¡Echaré a patadas a ese puerco! ¿Lo escuchas? ―amenazó con mandíbula y puños apretados―. Va siendo hora de que te unas al resto, de que seas la que eras…

Fue después de parir a los gemelos, cuando entre risas y celo las otras mujeres le endiñaron aquel tercero. Cosa que, al despertar la recién mamá creyó suyo. Claro que él lo dejó estar, incluso sabiendo que esto le acarrearía algún que otro problemilla. De todas formas, carecía de valor ante aquel hato de marujas juntas. Tampoco se paró en pensar que aquella bobada llegara tan lejos. Y él, ¿a qué esperaba para marcharse? ¡Le haría correr! Vaya que si correría… Llegó el momento de darles una lección, no solo a ellos, también al resto de las mujeres. Lo merecían, se lo habían ganado, de hecho, no eran más que eso; duro y puro ganado...

¿La tonta su favorita? ¿Y yo? ¡Un mamarracho! Menudo floripondio estaba hecho. Maldiciéndose una y mil veces tiró hacia el grueso de las lanzas cogiendo una de ellas. ¡Los atravesaré aquí mismo!, ―gritó exaltado―. Hecho que no consumó al cruzarse por medio el cachorro. Derrumbándole. Pelea que mantuvieron en tierra mientras él desprendía de su cintura una pequeña estaca. Momento en que interceptados por la esposa, para horror de ambos, al malograrse, se lleva la peor parte. Punto en que ve cómo crece, cómo se desarrolla el jabato. Volviendo al ataque: «Bastardo, hijo de… ».

En vuelo, lejos de verle el hijo, se escucha descolgarse al padre: «¡Bua! ¡Buaaaa!».

[lucia]

¿Son vampiros y el cachorro humano? Porque un semidiós que vuela casi ni los griegos...

[Cualquiera]

ya, el texto nació para un "duelo" cómico (je), y no fue su primer título. Lo puse a razón de leer algo por acá.

Nuestras mentes no son "creyentes". Y si el hombre ha creado algo, que sí, es la Lengua (idiomas). Y como cada cuerpo es un organismo es sí, pues ea, servidores de ella.