Pero acuerdate de llevarte la escalera, Nosin!!!!!!!nosin escribió:Ay, qué trabajos me pones Yo te llevo, sip.Protos escribió:De cualquier forma, Nosin, si tú sabes bailar, yo me dejo llevar.
de vuelta a Madrid
Pues como prometí estuve ayer de nuevo en Madrid, trabajando, y después hice una visita fugaz a los lugares sagrados de la última quedada (los que yo conocía al menos...).
En la FNAC coloqué dos libros de la Isis en la mesa, ya que uno de ellos estaba en la estantería. Compré El curioso incidente del perro a medianoche porque me parecía excesivo y muy snob volver a comprarme los mismos libros de la semana pasada...
Iba a patear lo mismo que pateamos antes de ir a comer, pero fui directamente al bareto a pedirme un mouse de chocololate de esos que servían congelados (o sea, que de mouse, nada).
Luego me quedé un rato en la esquina de Callao, donde nos encontramos con Azcárate, leyendo media página de la Isis en voz alta (nadie me miraba, se ve que en Madrid hay mucho bicho raro y ya no sorprende nada ).
Después me fui al primer Valor que encontré (no sé si era el mismo de la otra quedada) y me pedí una fanta que derramé sobre la mesa, pero sólo un culín, que tenía mucha sed.
Y como ya no sabía más lugares emblemáticos de la quedada del día 16, pues me fui a la estación y me volví para casa, con vuestras voces todavía resonando en mis oídos y una pequeña congoja en mi corazón, ansioso por saber cuándo podría volver a hacer otra visita mitómana...
En la FNAC coloqué dos libros de la Isis en la mesa, ya que uno de ellos estaba en la estantería. Compré El curioso incidente del perro a medianoche porque me parecía excesivo y muy snob volver a comprarme los mismos libros de la semana pasada...
Iba a patear lo mismo que pateamos antes de ir a comer, pero fui directamente al bareto a pedirme un mouse de chocololate de esos que servían congelados (o sea, que de mouse, nada).
Luego me quedé un rato en la esquina de Callao, donde nos encontramos con Azcárate, leyendo media página de la Isis en voz alta (nadie me miraba, se ve que en Madrid hay mucho bicho raro y ya no sorprende nada ).
Después me fui al primer Valor que encontré (no sé si era el mismo de la otra quedada) y me pedí una fanta que derramé sobre la mesa, pero sólo un culín, que tenía mucha sed.
Y como ya no sabía más lugares emblemáticos de la quedada del día 16, pues me fui a la estación y me volví para casa, con vuestras voces todavía resonando en mis oídos y una pequeña congoja en mi corazón, ansioso por saber cuándo podría volver a hacer otra visita mitómana...
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Todo se andará y podrás añadir mas sitios, seguro
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Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.
Mis diseños
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