Muy interesante lo que habláis, aunque respecto al lenguaje no tengo una posición clara. Comparto la tesis de que el lenguaje condiciona nuestro pensamiento. Aunque por otro, (no sé si es lo mismo), y en la línea de Wittgenstein, muchos de los problemas de nuestra mente son seudoproblemas ocasionados por las trampas y escollos del propio lenguaje. Por tanto, sí que parece haber una relación condicionada entre ambos elementos, el lenguaje y el pensamiento. La posición de Pinker no termino de entenderla. ¿Y vosotros?
Yo no diría tanto, Arden. Creo que es exagerado tratar al psicoanálisis como superchería. Jesús Mosterín diferencia entre el psicoanálisis como terapia y el psicoanálisis como teoría o modelo de la mente humana. Podemos concluir que no es científico aunque pretensiones tenía, pero sí partía claramente de unas bases observacionales y experimentales propias de la ciencia. Otro tema es que el origen del inconsciente sea lo Sigmund dice: el resultado de una censura o rechazo cuasimoral.Arden escribió:Me refería al psicoanálisis, es una superchería. Eso no quiere decir que Freud no sea un pensador que haya influido como pensador en el siglo XX, o que haya escrito libros que literariamente sean buenos, y sea todo parte de la cultura, pero ciencia no es.
Arden escribió:En cuanto al conductismo te pongo un ejemplo muy claro: las personas intersexuales. Durante mucho tiempo a los niños que nacían con hermafroditismo, uno de los tipos de intersexualidad, simplemente se les cortaba el pequeño pene, y se pensaba pues a partir de ahora se le educa como chica y ya está. Y durante años y años y años era educado como chica, se le vestía como chica, se le regalaban cosas de chicas, el pelo largo, etc..., el problema es que después no era una chica, odiaba ir vestido así, hacer todo lo que le decían que tenía que hacer, y lo que quería era ser un chico porque era lo que sentía, hasta que llegado a la adolescencia acababan por admitir que era un chico al que le habían cortado el pene...
Precisamente se les aplicaba la teoría conductista, si se le educa como chica será una chica, y no, no lo era.
No dudo de que el conductismo pueda tener validez, solo que de una forma muy limitada y no con la amplitud que se pretendía.
Muy interesante el ejemplo que muetras y que me sirve para rebatir las ideas de los conductistas más radicales como las de Skinner quien pensaba que la educación era la panacea de todo, que se podía moldear mediante la educación a cualquier ser humano y convertirlo en lo que quisiéramos. La experiencia ha desmentido esto. Y creo que por aquí van las críticas de Pinker a la idea de tabula rasa de los empiristas. ¿Sería la igualdad, entonces, una ilusión? Probablemente, y en algún sentido, sí.
Por eso, con independencia de la simpatía que nos cause o no la persona de Freud, la importancia de su método radica en haber querido enfrentarse a las concepciones conductistas que pretendían predecir y modelar al ser humano. Freud trata de entenderlo, y para ello indaga en la parte más desconocida e insondable: el insconciente. No hay que olvidar que hasta entonces, la enfermedad era considerada como meramente fisiológica, de origen biológico, y nadie antes se había atrevido a ir más allá. Poner el acento de la neurosis, por ejemplo, en aspectos más psicológicos amplían el conocimiento de nuestra naturaleza humana, que es al fin y al cabo de lo que se trata, de conocernos más y mejor. Esa proeza sí que es admirable.