Escritores suicidas

[Sunrise]

A mi también, y a más gente de la que creemos, seguro


Sara Teasdale

[Sunrise]

Un poema que me han pasado de Sara Teasdale que encontré muy pocos datos de ella...

Si tal vez la muerte es amable, y puede que haya un retorno,
volveremos a la tierra alguna noche fragante,
y tomaremos estos caminos para encontrar el mar, y doblando
respirar la misma azalea, baja y blanca.

Bajaremos de noche a esas playas resonantes,
y al largo, suave trueno del oceano,
aquí por una sola hora en la ancha luz de las estrellas
seremos felices, pues los muertos son libres.

[madison]

Es precioso Sun

[Sunrise]

Richard Brautigan

[Emera]

¡Qué hilo más interesante! Muchas gracias Protos y también a todos los que escribís por aquí.

[madison]

John Berrymn se suicidó el 17 de enero del 1972, se tiró por un puente en Minnesota. Su padre tmbién se quitó l vida, John lo encontró muerto, tenia solo 11 años

[Sunrise]

Su talento se ha malogrado. Ya no puede escribir.
Que guarde silencio entonces, hasta que las cosas cambien.
Tenemos la garantía de Goethe
para estar ociosos cuando ningún argumento se presenta por sí mismo,
o ninguno que pueda ser manejado adecuadamente.
Por eso recurro a su altísima palabra.
Aunque odie su raza, salvo a Hölderlin
& Kleist, a quienes él estrechó en el corazón de Henry:
un suicida & un loco,
enseñándoles a ellos lecciones que hasta ahora no era para nadie.
El lenguaje mejor trabajado por un extranjero,
Kafka, viejo camarada.
Henry, monstruosa alimaña, deponiéndose a sí mismo
ante la maquinaria de la colonia penal
sin lamentarlo en absoluto.
Y es que él fue la suma del dolor, tragándose su propio vómito,
decepcionando a la gente, defraudándolos a todos
en los bosques del alma.

Berryman

[Onírico]

Jaime Torres Bodet.jpg

(...) "Novo contaba –agrega Carballo– de cómo se había acostado con muchachitos que eran conscriptos y que a la postre llegaron a generales. Era horrible poder contar esas cosas. Recuerdo que cuando Torres Bodet llegó a la embajada de México en Madrid, un dístico malhecho corría por los cafés: Si ves a Torres Bodet, arrímate a la pared."

Un roce de hojas muertas en el viento

Hay quien apunta, como Rafael Solana, que todo fue obra del tedio. La versión oficial fue que una caída le produjo una fractura en la pelvis a la que siguieron intensos dolores. Los doctores diagnosticaron cáncer. En algún lugar de la mente del poeta –quizás por miedo al sufrimiento– ya germinaba la decisión. Pellicer contaría después que, en el sepelio de Novo, Torres Bodet le había dicho, mientras miraban el féretro, que ya solamente quedaban dos.

Su vida parecía normal. El jueves anterior había entregado a la editorial Porrúa la última parte de sus memorias titulada Equinoccio en la que trabajaba. Sin embargo ya antes le había dicho a Solana: "Si algo me sucede, quiero que usted revise mis papeles; Orpha ya sabe dónde están."

El lunes 13 de mayo de 1974 en la casa ubicada en el 326 de la calle Vicente de Güemes, en Lomas de los Virreyes, se oyó una detonación. La señora Josefina Juárez de Torres Bodet corrió a la biblioteca. Encontró a don Jaime recostado en su sillón, con la cabeza inclinada a la derecha y el revólver calibre 38 en la mano derecha. Según las crónicas periodísticas el cuerpo estaba junto a un cuadro del Dr. Atl que mostraba al Paricutín en erupción. La bala había ingresado por el paladar. La muerte fue instantánea. Sobre una mesa había una nota: He llegado a un instante en que no puedo, a fuerza de enfermedades, seguir fingiendo que vivo./ A esperar día a día la muerte, prefiero convocarla y hacerlo a tiempo./ No quiero dar molestias ni inspirar lástima a nadie. Habré cumplido hasta la última hora con mi deber.

Su cadáver fue velado en la capilla 7 de la agencia Gayosso. Su féretro fue cubierto por una bandera tricolor. Antes de reposar en la Rotonda de los Hombres Ilustres, sus restos fueron homenajeados en Bellas Artes y la Secretaría de Relaciones Exteriores. Don Jaime, al igual que Cuesta y Rivas Mercado, inventó su muerte, como bien lo dicen los seis últimos endecasílabos del fragmento IV de su "Nocturno": Pero si nada di, nada he pedido/ y, si de nada soy, a nada intento:/ espectador, no más de lo que he sido./ Como inventé el nacer, la muerte invento/ y sin otro epitafio que el olvido/ a la muerte me erijo en monumento.

[javibuddha]

Hola, aprovecho para escribir ahora, dado que es festivo en nuestra comunidad, Canarias, y que justo en este instante estábamos inmersos en la recopilación de datos sobre Sibilla Aleramo. Uno de los primeros enlaces al escribir su nombre es el vuestro. Me ha sorprendido que la incluyerais entre los "escritores suicidas", pero acabo de leer que, de hecho, intentó quitarse la vida. En un sentido más poético quizás podríamos afirmar que todo escritor es un suicida, en el sentido de que expone su universo interior al orbe -pero ésa es otra cuestión- He encontrado y os lo adjunto por si pudiera ser de vuestro interés un ensayo que incide en gran medida sobre su obra en prosa "Una donna", la que se le adjudica el "oneroso" título de primera novela "feminista" de la literatura transalpina. Normalmente la mayoría de lectores masculinos huyen como alma que lleva el Diablo en estas ocasiones, pero como expliqué, o traté de hacerlo -pido perdón de nuevo a las chicas- en la sala "Sólo para chicas", creo que es necesario adentrarnos en ese mundo, no sólo para conocer mejor cómo sienten y piensan las mujeres, sino, ya de paso, ahondar en nuestras propias claves.
http://www.raco.cat/index.php/Lectora/a ... 433/281300
También en la más que excelente página del poeta Fernando Sánchez Sabido "Poetas del siglo XXI" http://poetassigloveintiuno.blogspot.co ... eramo.html podemos leer algunos de sus poemas más significativos.
Por cierto, "Una donna", "Una mujer" fue publicada en castellano por la editorial Circe pero mucho me temo que no es sencillo encontrar ese texto. ¿O sí?
P.S. Y ya si me permitís, querría preguntaros acerca de el porqué de estos suicidas. Si exceptuamos el caso ritual de Mishima, e incluso podríamos contemplarlo como tal, ¿no estamos ante seres demasiado sensibles para afrontar las sombras ordinarias de la realidad? Si profundizamos en el tema, veremos que la edad para cercenar su vida ha sido diferente. Con Kirkegaard diría que padecieron de forma insoslayable la "enfermedad de la desesperación".

[javibuddha]

Hola, otra vez de nuevo. Al hilo de lo que veníamos hablando anteriormente, estas palabras, esta confesión de la propia autora en torno a su intento de suicidio podría arrojar cierta luz sobre esta senda tan sombría y tortuosa. No dejo de pensar en el evocador nombre Sibilla, que nos retrotrae al arcano de los augurios, quizás en sentido colectivo. Pero vayamos ya con el texto en sí:
"Decidir despedirme de mi propia vida ha sido una decisión simple, a pesar incluso de haberla tomado en un momento de gran confusión y parecía aquella bajo la égida de un eco distante, más que de un impulso o de una acuciante necesidad…"
Permitidme una pequeña crítica y espero que os suméis, aportando vuestro ÚNICO parecer. Habla de simpleza a la hora de decidir actuar contra natura, es decir, preservar la propia función vital, instinto incluso más arraigado de por sí en la mujer que en el hombre, puesto que la mujer es dadora de vida por antonomasia, como escribió Simone de Beauvoir. Admitiendo la confusión y cierta incertidumbre, es capaz de discernir en el laberinto interior con total naturalidad. Y, no por último, menos importante, posee el coraje -atributo que durante muchísimo tiempo fue atribuido exclusivamente a los hombres- y la valentía para, en este caso, hacer una confesión pública, sabiendo de antemano, que la sociedad, de alguna manera, se escandalizaría e intentaría "lapidarla".
Si mal no recuerdo, hay una película italiana sobre esta escritora y poeta basada en la correspondencia epistolar de la propia Aleramo, Dino Campana y dirigida por Michele Placido, rodada entre 2000 y 2002 -no lo recuerdo con seguridad- y, entiendo, que muy recomendable para poder imbuirnos, si cabe, un poco más de todas estas animadversiones -palabra usada en la película aunque en el doblaje al castellano no se tradujera correctamente, por desgracia, perdiendo gran parte del matiz original.

[Pulp]

Marco hilo para leerlo con calma...

[hierbamora]

Marco hilo para leerlo con calma...

Yo también.

[El Otro]

Muy buen hilo, siempre me llamó la atención la cantidad de escritores japoneses que se han suicidado, alguna vez pensé en investigar un poco sobre el tema, pero por ahora lo abandoné, puede que en la cultura japonesa haya un enfoque distinto respecto al suicidio, bueno, lo hay. Pero no es fácil de entender y menos de explicar, en el hilo he visto menciones sobre Mishima, Kawabata y Ryunosuke Akutagawa... pero hay más, por ejemplo: Osamu Dazai, que en principio sólo era conocido en su país, pero que desde hace ya tiempo va siendo traducido ha diferentes lenguas inclusive la nuestra, Arishima Takeo, que se suicidó junto a su amada en 1923 al ser descubierto el romance que ellos vivían siendo ella casada, en aquellos años el Japón era muy conservador y de rígidas costumbres. Nos perdimos de más maravillas que nos pudo haber dejado. Tamiki Hara, sobreviviente de la bomba atómica que se lanzó sobre su ciudad: Hiroshima, tuvo algún intento fallido algunos años antes. Fue esencialmente poeta. Hay más.