En otros momentos de la historia se han cambiado cosas porque la mayor parte de la población las decía así. Por ejemplo, en un momento dado, las mentes pensantes decidieron simplificar la palabra efecto (o más bien el grupo conseonántico -ct-) por efeto, pero la población siguió diciendo la primera variante, por lo que los conservadores de la lengua tuvieron que rectificar y cambiar las normas; lo mismo ocurrió con digno-dino, sobreviviendo la primera. Otras veces se ha modificado la norma para incluir plurales de ciertas palabras (sobre todo extranjeras); en muchas de ellas, la Academia, optó por su versión traducida, pero cuando esos vocablos no tuvieron ningún éxito frente a su variante original, no les quedó otra que aceptar la variante extranjera y, en consecuencia, crear nuevos plurales (en su momento un tanto raros) modificando la norma.imation escribió:no soy filóloga ni nada parecido, pero eso de que porque se extienda se tenga que cambiar no creo que sea un motivo y otra cosa, lo del laismo y leismo se oye depende en que provincias o zonas, en otras no solamente no se oye sino que "canta" mucho cuando se oyeJosephine Maine escribió:Suelen cambiar la norma cuando "el error" está extendido a casi todo el ámbito de la población. El leísmo y laísmo se está extendiendo cada vez más y de ahí surge mi esperanza de que algún año se pueda normativizarChubbchubb escribió:Jo, el lleísmo lleva intentando extinguirse desde el s.XIV y aún no se lo han permitido... ¿De veras crees que cambiarían la norma con los leísmos, laísmos, y demás?... Esos, cambios ortográficos chorras sí, pero actualizar la normativa...
buen hilo
Estoy de acuerdo contigo en que el laísmo y el leísmo "canta" en algunas zonas (por ejemplo, tengo una compañera malagueña que le chirría un montón), pero debemos de tener en cuenta que es un fenómeno que nació en el interior de la Península y que, con el paso de los años, se ha ido extendiendo a otras zonas. Es curioso, además, que cada vez más hablantes tengan la distinción de los usos un tanto difusa y que este fenómeno cobre más vitalidad cada década.
Si existe una variante mayoritaria que a la Real Academia actual no le parece descabellada (y poco a poco va tragando con los leísmos y los laísmos), no sería tan extraño que acabase cediendo y se modificara la norma. Y más teniendo a un portavoz de renombre como es Cervantes
Imation, bienvenida a este hilo