CPVI: Amalia - RAOUL (3º Jurado)

[Naldrin]

Es cierto que el esfuerzo hecho para emular el estilo decimonónico merecía un reconocimiento como el que ha obtenido. Pero se corría el riesgo de que a los lectores actuales el estilo nos resultase difícil de leer. Enhorabuena.

[Berlín]

Felicito de corazón al dueño/a de esta maravilla. Que sepa que uno de mis votos ha sido para él o ella.
De hecho pensé que sería el relato ganador.

[Isma]

Se hace de rogar este autor canalla, asustado tal vez por la magnitud de comentarios y de dudas a las que ha de responder. ¡Vuelve y explícate como un hombre!

Fantástico relato y merecido reconocimiento.

[RAOUL]

Bueno, en realidad he participado en este baile de disfraces bastante desenmascarado o fácilmente desenmascarable . Y sin salir del foro. Es que recordé que en su día fui yo quien abrió en el subforo de Bellas Artes el hilo de Madrazo, empezando ni más ni menos que con un post del retrato de la condesa. Así que me decía: caray, a cualquiera que se le ocurra consultar en el índice correspondiente y acudir a ese hilo buscando información tendrá la clave

En fin, agradezco de corazón todas las críticas y comentarios. Evidentemente, se podría decir que las opiniones han estado muy divididas: unas decían que el relato era un pestiño y otras decían que era un aburrimiento (todas esas opiniones expresadas muy educadamente, eso sí ). Bueno, es broma... Las críticas menos positivas me han ayudado a reflexionar y han modificado mi percepción, han hecho que en estos momentos me esté replanteando la historia desde varios frentes. Pero desde luego ha sido enormemente gratificante encontrar a foreros que tras la lectura se han preocupado de indagar en los entresijos de la historia -ésa, ésa era precisamente una de las ideas del relato-. Y qué emocionante ha sido, por ejemplo, leer a Isma acostándose tarde e incluso elaborando ¡una tabla de personajes! ¿Qué puedo decir? ¿Puede haber algo más hermoso que eso? Conseguir que algo que te apasiona apasione también a otra persona. Para mí eso recompensa mil veces todo el esfuerzo

Quisiera aclarar algo sobre la extensión de relato. Cuando tras meditar mucho sobre la historia y documentarme en la medida que pude (tampoco tanto como se pueda pensar, pero sí bastante) me puse manos a la obra, fui pronto consciente de que el relato, seguramente, "se me iba", lo cual me causó cierta frustración porque lo escribía para presentarlo al concurso. Pero bueno... Continué, aceptando que en cualquier caso podría presentarlo fuera de concurso. Cuando lo acabé vi que, respetando las reglas, podía enviarlo. Es verdad que ajustaba y apuraba mucho los márgenes, pero encajaba. De hecho tengo una versión incluso más amplia en pdf que está en el límite de esas seis páginas. Por determinadas razones técnicas aún hubo que hacer un corte y, así, elegí para eliminar un par de cosas de la escena central: una que aclaraba la identidad de Octavio al tiempo que añadía cierto misterio sobre su relación con Iturbieta, además de referirse al hijo de Gonzalo; y otra más hacia delante que contenía un pensamiento de Molins en respuesta a la pregunta de Ezpeleta, o de Isabel II: "¿por qué no pueden los españoles amarse unos a otros?" -qué pregunta, ¿verdad? cuántas claves de nuestra Historia están ahí- y una intervención algo chusca de Iturbieta replicada por Ezpeleta que tenían todo el sentido en 1853, pero que resultaban ininteligibles para un lector de hoy... Pero ya digo, esa versión, como tener, tenía 6 páginas, y en ellas estaban toda mi intención y mi propósito al escribir la historia. Y además había espacios en blanco entre los párrafos, no como ha salido en la versión más compacta que habéis podido descargar.

Digo esto porque se ha comentado mucho lo de la novela... Bien, ya explicaré mi idea y mi propósito en este relato, que, repito, encajaban en el texto, aun reducido, presentado. Otra cosa es que tras acabarlo -lo hice la víspera del plazo de entrega-, y ayudado por vuestros comentarios, me haya podido y me esté pudiendo replantear ciertas cosas. Pero que conste que no es que hubiera escrito o quisiera escribir algo de superior extensión y me haya afanado por encajarlo. La cosa no va por ahí. Y no digo más sobre esto.

Y bueno, efectivamente hay muchísimas cosas que podría comentar sobre este relato y la historia que cuenta. Anoto las preguntas formuladas y poco a poco intentaré responderlas. Porque hay una razón y una explicación para todo. O casi. Y en todo caso cada lector puede dar la suya. Qué le sucede al conde, qué sentido tiene lo de la paloma, el por qué de las historias de Larra y de la viuda de Riego, si hay una infidelidad de la condesa... Al tiempo tendré ocasión de compartir algunas cosas que fui descubriendo durante el proceso de documentación, algunos detalles que a las personas a las que les haya interesado lo que se cuenta estoy seguro de que les gustará saber .

Y repito mi agradecimiento a todos y al jurado .

Con un abrazo especial para Topito, mi rival en los amores de Doña Amalia

Ciro, eres muy generoso Para mí el mayor premio es que haya habido gente que, como a ti, le haya gustado y haya leído con atención esta historia. No sabía yo cómo se recibiría un relato tan introspectivo, ambiguo y vago por momentos, con una trama prácticamente inexistente; una cháchara de españoles de mediados del siglo XIX hablando de sus cosas y, por si fuera poco, recordando "batallitas" acaecidas 15 o 30 años antes. Para mí es un honor este tercer puesto compartido y tener por delante un relato tan magnífico como el de Berlín, que ha sido el preferido de jurado y público por méritos propios

[imation]

Enhorabuena Raoul, aun no lo he vuelto a leer, pero lo haré .

[Isma]

Pues sí, mi más sincera enhorabuena. De verdad que me hizo disfrutar. En tu relato distingo distintos niveles de profundidad cuyo descubrimiento está en manos del lector y eso es lo que me gusta, que un relato me exija y tire de mí. Con Amalia hay que ser un lector activo.

Me alegro mucho de que mi comentario te recompensara de alguna manera por todo el trabajo que has hecho. La próxima vez empezaré a leer por la mañana para que no se me haga tarde

[Ororo]

Te hemos pillado todos, eh?
Enhorabuena por el premio!!

[Berlín]

Mi querido Raul ¿sabes que siempre acabo votándote a ti?

Enhorabuena por este gran relato, que debería estar en primer lugar, bajo mi humilde opinión.
Volveré a leerlo muy tranquilamente, pues estos días andamos todos muy saturados con tanta lectura. Como te comenté encuentro a Larra fascinante, pero desconocía el tema del poema leído en el entierro por Zorrilla, así que me fui a buscar información y lo leí. Una maravilla, por cierto.
O sea que gracias a tu relato ahora sé un poquito más, y eso quiere decir que me has aportado algo nuevo y valioso, así que unido a tu brillante y lúcida forma de escribir, pues no tengo más remedio que darte las gracias.

Un abrazo.

[Cronopio77]

Acerté mi quiniela particular. No la hice pública en su momento porque, por alguna razón que no alcanzo a comprender, mucha gente pensaba que este era mi relato.

No añado nada a lo que dije en su momento. Raoul, estaré encantado de leer algunas de las explicaciones que has prometido.

[Ángel_caído]

Enhorabuena Raoul...yo soy una de las que descubrió tu hilo sobre el cuadro lo que terminó de confirmar mis sospechas. También espero con muchas ganas a leer tus explicaciones.

[RAOUL]

Estaba vendido, maldición.

Gracias a todos. Berlín, a mí tu relato me parece soberbio, mejor que el mío, dentro de que son muy distintos. Y por eso también lo voté.
Lo de Larra es apasionante. Realmente lo que pasó en esos tres días de febrero de 1837, desde que en la mañana del 13 Larra abrió los ojos sin sospechar que esa misma tarde se pegaría un tiro, hasta la mañana del 15, en que Zorrilla pudo llegar a su cuchitril y cerrar por fin los suyos después de dos noches prácticamente en vela, preguntándose si lo que le había pasado había sido verdad o sólo un sueño, es absolutamente fascinante. Ahí desde luego hay materia para una novela. Espera, porque me resulta imposible dejar de contar unas pocas cosas sobre eso, sobre cosas que pasaron esos días, que estoy seguro de que encontrarás interesantes.

Bueno, como no soy entendido en arte tampoco voy a disertar aquí sobre el cuadro de Madrazo, origen de esta historia. Es posible que hiciera retratos mejores, pero quizás ninguno supera en encanto a éste. Es espectacular la plasmación del maravilloso vestido pero, lo mejor y lo más inolvidable, es el encanto irresistible, mágico, que de desprende del conjunto y que a uno -a mí me pasa, por lo menos- le arrastra al embeleso. Nace ese embeleso de la expresión de Amalia, de su postura peculiar, apoyada en un brazo e inclinada hacia el espectador, de esa mano que acaricia su rostro, de esa media sonrisa y de esos ojos. Según cómo y cuándo se la mire, Amalia parece que va a decir algo o que está escuchando algo, o parece indicar que no le hace falta que el espectador le diga nada porque ya ella lo sabe todo... Y en fin, hay feminidad, dulzura, intimidad, pero también coqueteo y travesura. Y majestad. La condesa impone respeto y distancia. Se la puede mirar como madre, hermana, incluso como reina. Más difícilmente como amante. En realidad, la condesa parece un sueño o una invitación al sueño.

En fin, a mí me resultó inevitable indagar sobre la mujer del cuadro y, por lo que fui averiguando, no pude sentirme decepcionado. La condesa de Vilches fue una mujer interesantísima. Artista ella misma, amiga, musa y protectora de artistas, la mejor amazona de Madrid, cantante, pianista, magnífica actriz, según todos los testimonios, que hizo de su casa un teatro, escritora de dos novelas... Fue una mujer sinceramente admirada y querida. Aún así yo no he logrado recabar una información exhaustiva. Hay libros a los que no he podido tener acceso y recorriendo la prensa de la época sólo he encontrado pequeñas pistas y referencias: la condesa triunfa en una representación aquí, deslumbra en una fiesta de disfraces allá o participa en una función religiosa o benéfica acullá... pero todo breves reseñas. La información más larga la he hallado precisamente en la crónica de su funeral, multitudinario. Había allín un sinfín de hombres (de la misma forma que el de Lope de Vega hubo un sinfín de mujeres ). "Amalia había nacido para embellecer la existencia de cuantos seres la rodeaban. ¿Quién como ella poseía el doble encanto del ingenio y de la gracia?", dice el cronista.

¿Al lado de una gran mujer hay un gran hombre? Quien verdaderamente acabó interesándome como personaje literario fue el conde. No voy a cansar con los datos que obtuve de él. Diplomático y político, diputado en varias legislaturas muy probablemente en votaciones fraudulentas. No destacó especialmente en su labor. Rico gracias a su matrimonio (eso sería una larga historia). En su éxito social jugó también un papel crucial su mujer, amiga de la Reina y flor de la sociedad. También en su ennoblecimiento. Sin embargo, un dato llama la atención. ¿Por qué los Vilches, nobles de nuevo cuño, distinguidos y riquísimos, no inauguraron su propio panteón funerario? Pues Amalia fue enterrada en el panteón familiar de los marqueses de Almonacid, con su padre político y su madre, mientras Gonzalo acabó unos años después en un modesto nicho individual del mismo cementerio de San Isidro. ¿Por qué esta diferencia? Es evidente que fue voluntad de Amalia ser enterrada junto a su madre, que por lógica estaba enterrada junto a su segundo esposo. Pero eso también significaba la decisión de que Gonzalo nunca fuera enterrada con ella, porque un conde de Vilches no pintaba nada en el panteón de los Almonacid.

Por esto y otras consideraciones me fijé en la figura del conde, y a partir de ahí creé su personaje literario (un personaje para mí muy querido, lo he de decir) y lo hice protagonista. Además un personaje sufriente. ¿Por qué sufre el conde? ¿Sospecha de una infidelidad de Amalia, cree que no lo quiere? Entiendo que no es eso. No puedo pensar que Amalia le fuese infiel y menos con Madrazo. Si alguien extrae esa conclusión de la familiaridad que rezuma la última escena, hay que decir que es que los Madrazo y los Vilches eran muy amigos. De hecho Madrazo, que era el primer retratista de España y, por tanto, el más caro, hizo a los Vilches un precio de amigo por este cuadro. Que Madrazo estuviera enamorado de Amalia lo creo posible (de un modo platónico, sí; en cierto modo, uno no puede pintar un cuadro así sin enamorarse o estar enamorado un poco, supongo). Que Amalia estuviera enamorada de Madrazo me parece improbable. Y en todo caso lejos de mi intención sugerirle unos cuernos al pobre Gonzalo o infamar la honestidad de tan alta y digna señora. Pero quizás... No sé. No sé qué pasa en la última escena, qué le pasa a Amalia. Digamos que mientra en el corazón del conde me atrevo a entrar hasta el fondo, en el de la condesa me quedo en los umbrales. No sé y tampoco quiero rasgar el velo, desvelar el misterio

Pero, ¿qué le pasa al conde, a un hombre al que la vida le sonríe? A un hombre amado por sus hijos, a quien se le recibe alegremente cuando llega a su casa, que está profundamente enamorado de su esposa, que es rico y distinguido, que no parece tener preocupación alguna. Pues, a mi juicio, lo que le sucede al conde es que tiene un monstruo dentro muy poderoso.Y ese monstruo se llama Depresión. Ni más ni menos y así de simple. Una depresión con episodios de angustia y pánico imprevistos. Ahí es donde entra la paloma.
La noche anterior a la mañana en la que comienza el relato, el conde acudió a visitar a su hijo enfermo. En un momento determinado se acercó a la ventana y vio que en el alféizar se había posado una paloma, posiblemente herida o enferma, ya casi moribunda. Ese hecho y esa visión desataron en él un ataque de angustia. Sin embargo el conde quiso reaccionar contra ese sentimiento incomprensible, afrontar su miedo. Intentó abrir la ventana y recoger a la paloma pero no lo logró. Su mano quedó rígida sobre la falleba y no fue capaz de ir más allá. A la mañana siguiente pasó lo mismo. Intentó tocar a la paloma muerta con su bastón y tampoco pudo. Para el conde tocar la paloma representaba un triunfo, un triunfo contra su angustia interior. La lucha a muerte contra la paloma significa en realidad una lucha a fondo contra la depresión, contra ese monstruo, contra esa enfermedad, contra ese sentimiento que le está devorando por dentro. Tocar a la paloma suponía para él vencer en un reto, triunfar sobre ese miedo y esa angustia que el animalito le provocan (pero eso no es cierto y en eso se equivoca: el terror no le viene de fuera sino de dentro). En este sentido la paloma exterioriza la depresión.
Hay un detalle y es que, a la tarde, el guardacantón junto al que había quedado el cadáver de la paloma se dice que "relucía". ¿Por qué relucía? ¿Tal vez por qué ha llovido? ¿Tal vez porque alguien le ha sacado brillo? ¿Es posible que el cadáver de una paloma estuviera toda una mañana delante de la casa de los Vilches sin que nadie lo recogiera? ¿Cuando además esa misma noche se iba a celebrar una fiesta? ¿No es lógico pensar que una criada de los Vilches estuviese encargada de barrer todas las mañanas la acera de la calle y, en ese caso, no pudiera dejar de retirar la paloma? Así pues, cuando el conde se asoma a la ventana y dice que "la paloma seguía allí, sobre un charquito de sangre reseca",¿realmente la paloma sigue allí? Pues muy posiblemente no. Y eso no significa que el conde tenga una alucinación. Simplemente que él la sigue viendo aunque no está, que tiene su imagen clavada, porque su dolor, su angustia, su miedo, su depresión no se han ido con la paloma. Le acompañan y se quedan con él.

Bueno, no sé si se me he explicado. En todo caso, luego ese miedo del conde se va a contraponer con el valor, con la valentía, que van a representar en la tertulia las figuras de Torrijos y Zorrilla. La cosa es que yo siempre tuve la idea de meter la crisis emocional del conde en la crisis nacional de España y hacer una reflexión sobre España y sobre la historia de España en el siglo XIX. Ahí entrarían Larra y el exilio español. Pero eso ya es otra historia.

En cualquier caso, que quede testimonio de mi cariño por el conde . Si de algo me siento medianamente satisfecho es del monólogo interior frente al relato de su mujer. Fue lo último que escribí y no tenía ni idea de lo que Gonzalo podría decir y, sin embargo, resultó que me salió de un tirón y que además me salió con el corazón . Mis respetos, mi simpatía y mi piedad hacia el conde de Vilches. Espero que nunca tuviera una enfermedad como la que aquí se describe. Supongo que todos conocemos testimonios de lo terrible y devastadora que puede resultar una depresión.

[Gavalia]

Enhorabuena Raoul y gracias por tu relato.

[kassiopea]

Mis felicitaciones, Raoul, pues la calidad de tu relato resplandece con claridad meridiana... aunque no te voté. Sentí más empatía hacia otras historias, aunque la tuya es monumental. Tu talento es indiscutible y no puedo más que sentirme admirada ante él

Apasionante tu último comentario. ¡¡¡ Qué pedazo labor de documentación has realizado !!! ¡¡¡ Con qué primorosa pericia y sensibilidad te has acercado a los protagonistas de tu relato!!! En especial, a la figura del conde. El monólogo interior del conde frente al famoso retrato, se me antoja sublime. Y lo escribiste de un tirón !!!!!!!! ¡¡¡ Menuda inspiración !!!

Gracias por explicar el simbolismo de la paloma. Muy interesante, me sentía muy intrigada por esta cuestión. Yo pensé que el animal muerto era un símbolo de la decadencia vital del conde, y de su sentimiento de pérdida de identidad... eso imaginé y creo haberlo comentado

Reitero una vez más lo que tanto se ha comentado: ¡¡¡ aquí hay material para escribir una novela !!!

Encantada de haberte leído, Raoul. Mis saludos, con admiración

[Topito]

Bueno Raoul que no había pasado aún por tu hilo para dejar ese abrazote para mi rival en el concurso.

Sigo pensando que esto da para un relato largo y más con la gran documentación que tienes. La condesa fue nuestra musa, sin embargo, para ti fue un personaje más, y en mi relato una proyección de la belleza de la época -tan distinta de la belleza actual- sobre mi personaje. Fue un soporte donde ubiqué mi lienzo para comenzar mi cuadro.

Por cierto, se rumorea, pero nunca se ha podido comprobar, que La Regenta está inspirado en la condesa de Vilches... "Esa es la conclusión a la que ha llegado un equipo del Departamento de Filología Española de la Universidad de Oviedo",escriben en El Tahúr manco. Fue un gran personaje de la época sin duda alguna.

[ciro]

Bueno RAOUL, creo que por ahí me das las gracias por mis comentarios. Yo simplemente me siento orgulloso de compartir concurso con un escritor con tanto talento como el tuyo. Me pareces impresionante. Ya me lo pareciste con "La habitación", para mi el mejor relato que se ha escrito en la historia del concurso. Aunque, para mí, no necesitaba explicación para saber que tu relato era muy muy bueno, la explicación siempre engrandece los relatos y la tuya no podía ser menos. Por Dios, plantéate lo de la novela. Yo la leo sí o sí.
Creo que es poquísimo el premio que te llevas en esta ocasión, pero te auguro, si es que nos castigas al resto de participantes a seguir escribiendo en este concurso (por el hecho de que no nos vamos a comer un rosco), muchos más premios y que incrementarás en mucho el nivel de éste, pues siempre es un placer enorme leerte.