Encierro - Maldito clip - Wintermute
Publicado: 29 Jun 2015 09:27
Maldito clip
En una habitación de joven, a oscuras, EL JOVEN BILL GATES teclea furiosamente. De repente, se detiene y contempla extasiado el monitor.
EL JOVEN BILL GATES
¡Madre! ¡Madre! ¡Venga aquí, lo he inventado!
MADRE DE BILL GATES
¿Qué quieres, hijo? Son las tres de la mañana… ¿Qué has inventado esta vez?
EL JOVEN BILL GATES
¡El corrector perfecto! Madre, usted podrá teclear cualquier frase, con los peores errores de sintaxis y los más graves gazapos y el ordenador le replicará con sus pecados corregidos.
MADRE DE BILL GATES
Pero hijo, ¡eso es una abominación! Las madres estamos para corregir los errores de nuestros hijos. ¿Qué haremos si nos quitas eso?
EL JOVEN BILL GATES
Madre, ¡es el progreso! Todos podrán expresarse sin que el listillo de turno les corrija a cada frase...
MADRE DE BILL GATES
¡Ni progreso ni progresa! A la cama y borra ese programa del demonio.
EL JOVEN BILL GATES
¡Pero madre!
MADRE DE BILL GATES
¡No me repliques! Y a ver si dedicas tu tiempo a cosas de provecho en vez de a esas tonterías.
El joven Bill Gates se dirige refunfuñando a su cama, enojado. Una vez acostado, una explosión de luz y humo inunda su cuarto. Un extraño hombre barbudo con una túnica estampada de ceros y unos se planta en medio de la estancia.
EL JOVEN BILL GATES
¿Quién anda ahí?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡Bill! ¡Bill! ¡Has osado violar la ley de Turing de lo computable y lo indecidible!
EL JOVEN BILL GATES
¡Pero si yo sólo he escrito un corrector ortográfico! Además, ¿no llega usted un poco tarde?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡Ni pero ni peras! Además, en esta época los módems van a 300 baudios y ha tardado mucho en llegarme lo tuyo. Te salvas de que te enseñe el futuro desastroso que traería tu creación, que vamos justos de extensión y tu madre te ha dado lo suyo. Además, esto no es Dickens.
EL JOVEN BILL GATES
¡Gracias, oh dios de la computación! Corregiré mi camino y me dedicaré a escribir el buscaminas.
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡No creas que te vas a librar tan fácilmente! ¡Yo te maldigo! Por querer corregir todo error humano y con ello, privarles de la virtud de aprender de sus errores y hacer de las máquinas dioses, yo te castigo. Tus programas serán populares en el mundo entero, pero todos tus usuarios te odiarán por cualquier bug. Cualquier programa tocado por ti frenará el más potente superordenador y Moore no te salvará.
EL JOVEN BILL GATES
¿Pero eso quiere decir que me puedo forrar igual, no?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
Por tu insolencia, ¡añado que las mujeres te ignorarán a ti y a los de tu especie!
EL JOVEN BILL GATES
¡NOOOOOOOOOOOOOO!
En una habitación de joven, a oscuras, EL JOVEN BILL GATES teclea furiosamente. De repente, se detiene y contempla extasiado el monitor.
EL JOVEN BILL GATES
¡Madre! ¡Madre! ¡Venga aquí, lo he inventado!
MADRE DE BILL GATES
¿Qué quieres, hijo? Son las tres de la mañana… ¿Qué has inventado esta vez?
EL JOVEN BILL GATES
¡El corrector perfecto! Madre, usted podrá teclear cualquier frase, con los peores errores de sintaxis y los más graves gazapos y el ordenador le replicará con sus pecados corregidos.
MADRE DE BILL GATES
Pero hijo, ¡eso es una abominación! Las madres estamos para corregir los errores de nuestros hijos. ¿Qué haremos si nos quitas eso?
EL JOVEN BILL GATES
Madre, ¡es el progreso! Todos podrán expresarse sin que el listillo de turno les corrija a cada frase...
MADRE DE BILL GATES
¡Ni progreso ni progresa! A la cama y borra ese programa del demonio.
EL JOVEN BILL GATES
¡Pero madre!
MADRE DE BILL GATES
¡No me repliques! Y a ver si dedicas tu tiempo a cosas de provecho en vez de a esas tonterías.
El joven Bill Gates se dirige refunfuñando a su cama, enojado. Una vez acostado, una explosión de luz y humo inunda su cuarto. Un extraño hombre barbudo con una túnica estampada de ceros y unos se planta en medio de la estancia.
EL JOVEN BILL GATES
¿Quién anda ahí?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡Bill! ¡Bill! ¡Has osado violar la ley de Turing de lo computable y lo indecidible!
EL JOVEN BILL GATES
¡Pero si yo sólo he escrito un corrector ortográfico! Además, ¿no llega usted un poco tarde?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡Ni pero ni peras! Además, en esta época los módems van a 300 baudios y ha tardado mucho en llegarme lo tuyo. Te salvas de que te enseñe el futuro desastroso que traería tu creación, que vamos justos de extensión y tu madre te ha dado lo suyo. Además, esto no es Dickens.
EL JOVEN BILL GATES
¡Gracias, oh dios de la computación! Corregiré mi camino y me dedicaré a escribir el buscaminas.
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
¡No creas que te vas a librar tan fácilmente! ¡Yo te maldigo! Por querer corregir todo error humano y con ello, privarles de la virtud de aprender de sus errores y hacer de las máquinas dioses, yo te castigo. Tus programas serán populares en el mundo entero, pero todos tus usuarios te odiarán por cualquier bug. Cualquier programa tocado por ti frenará el más potente superordenador y Moore no te salvará.
EL JOVEN BILL GATES
¿Pero eso quiere decir que me puedo forrar igual, no?
EL DIOS DE LA COMPUTACIÓN
Por tu insolencia, ¡añado que las mujeres te ignorarán a ti y a los de tu especie!
EL JOVEN BILL GATES
¡NOOOOOOOOOOOOOO!