jilguero escribió:Solo decirte, arquerita, que me alegro de que sea el texto de una veterana, porque así no tienes duda de que no es tu relato sino la temática del relato lo que está más allá de mi línea de tolerancia (me pasó antes con uno de Tadeus y otro de Gisso).
No le he dado una oportunidad a este relato ni de momento (nunca se sabe cómo puede uno evolucionar) se la daré a ningún otro de estas características. Tal vez te resulte difícil comprenderlo pero hay cosas hacia las que siento tal rechazo en la vida real que negarme a leerlas en ficción es mi manera de rebelarme.
Bueno, no te pido que me comprendas, pero si te pido que no olvides que esto forma parte de las luchas personales que cada cual lidia de la mejor manera que sabe. 
Y haz el favor de no dejar la triada coja. 
A ver, Jilguerillo, sí que me dio rabia que no le dieras una oportunidad, para qué negarlo. A todos nos gusta que nos lean y esto es un concurso, así que vistes a tu criatura con sus mejores galas (las que puedes, las que necesita o las que quieres) y lo envías con cierto temblor en tus entrañas (esto sigue pasando aunque seas veterana) para que otros lo juzguen. Y he aquí que no es que les repugne o que el vestido sea feo a sus ojos o su esencia no huela como a uno le gusta, es que no abren la puerta. Dicho esto, que me parece importante para que me entiendas a mí, te diré que a mí estas pataletas se me pasan. Duran más o menos, pero se me pasan. Así que no te preocupes por eso que una tiene más madurez mental de la que aparenta a través de la pantalla en ciertas ocasiones.
Sobre la tríada... A veces necesitamos un descanso y focalizar la energía en un lugar concreto. En esta época en la que quiero escribir algo más "serio", si eso es posible, pues dividir mi energía entre los concursos y lo otro es complicado. No puedo decir ahora que no voy a participar en primavera porque no lo sé, pero sí que necesito desconectar un poco del foro. Me siento a gusto y muy apreciada aquí por casi todos (salvo honrosas excepciones, como en todos los sitios). Y volveré cuando lo estime conveniente a seguir repartiendo abrazos y achuchones, y algunas collejas. Ahora mismo no necesito hilos de cometas que me enreden o que me lleven de un lugar a otro sin sentido, sino volver a encontrar mi viento, que creo que está un poco perdido últimamente.
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