La Nueve: Los españoles que liberaron París - Evelyn Mesquida

[Rotia]

Nº de páginas: 304 págs.
Encuadernación: Tapa dura
Editorial: S.A. EDICIONES B
Lengua: CASTELLANO
ISBN: 9788466620703

Una historia apasionante y olvidada sobre la contribución española en la Segunda Guerra Mundial.La mayoría de los hombres que componían la Nueve tenían menos de 20 años cuando en 1936 cogieron las armas por primera vez para defender la República española.
Ninguno sabía entonces que los supervivientes ya no las abandonarían hasta ocho años después, y que en la noche del 24 de agosto de 1944 serían los primeros en liberar París con la compañía de la Segunda División Blindada del general Leclerc. Los carros de combate llevaban, en el morro y en los flancos, nombres sorprendentes: Brunete, Teruel, Ebro, Guernica. Los soldados se apellidaban Granell, Campos, Bernal, Fábregas, Royo, Pujol, Domínguez. Este libro cuenta su aventura.

Totalmente recomendable. Se puede ver algún documental en youtube sobre el tema, y también leer el cómic de Paco Roca los Surcos del Azar.

[Arden]

Una historia a recuperar.

Gracias por el hilo

[Aben Razín]

El primer tanque que entró por el Arco del Triunfo, aquel día de la liberación de París, llevaba el nombre de Teruel, ¿casualidades?,

Bueno, me alegra que se recupere esta parte de la historia,

Lamentablemente, no se encuentra en el catálogo de la biblioteca, aunque he encontrado otra edición del 2008:

La Nueve: los españoles que liberaron París, Barcelona, Ediciones B, 2008. 1ª edición. Prólogo de Jorge Semprún. Colección: No ficción. Historia. Tiene 284 páginas y el ISBN es 978 8466620703.

[Aben Razín]

Añado la edición que se encuentre en el catálogo de la biblioteca y que he reservado para leerla,

La Nueve: los españoles que liberaron París, Barcelona, Ediciones B, 2016. 1ª edición. Prólogo de Jorge Semprún, precedido de dos textos de Albert Camus. Tiene 332 páginas y el ISBN es 978 84-666-5935-2.

[Aben Razín]

Lo empiezo mañana,

[Aben Razín]

Antonio Machado.

(Así se llama el capítulo donde me he quedado y que pertenece a la Primera Parte de la obra)

He leído los textos de Albert Camus y Jorge Semprún, así como el primer capítulo. En los dos primeros, se muestra el homenaje y el reconocimiento a la Nueve como elemento extraño y distinto del período de la Segunda Guerra Mundial en el ejército de los Aliados. Bien es cierto que no se haya reconocido su valía y entrega hasta el siglo XXI, sobre todo, cuando ya se entendía, hacia final de la contienda, que habían hecho un esfuerzo sobre humano, incluso estando en el desembarco de Normandía desde su puesto en Inglaterra. Sólo la alcaldesa Anne Hidalgo ha entendido la importancia de unos españoles que decidieron llegar el 24 de agosto de 1944 a las puertas de París para anunciar la liberación de la capital francesa.

En el primer capítulo, Evelyn Mesquida nos sitúa en el desastre de la huida del ejército republicano, personalizado en el exilio y muerte de Antonio Machado en Collioure. Ciertamente sobrecoge en esos días de enero y febrero de 1939, con frío y nieve, el éxodo terrible de los restos del ejército con una cantidad ingente de civiles. Sabía de esa situación, pero volverla a repasar hace que tome tintes más dramáticos.

Por ahora, se lee fácil, porque el estilo es didáctico y periodístico, así que sigo con gusto. Ese cómic de Paco Roca tuvo la culpa, ¡bendita ella!,

Sigo leyendo,

[Aben Razín]

Segunda Parte: Paisaje de hombres en guerra.

Estoy terminando la Primera Parte y me sigue atrayendo la lectura de esta obra, tanto por el tema como por las formas de narrar. En el fondo, algo cuenta de lo que somos capaces de hacer los españoles cuando nos proponemos una tarea común. Y finalmente sorprendemos por nuestro quehacer -en este caso, no hay más que acudir a los testimonios del general Leclerc-.

General Leclerc.jpeg.jpg

https://es.wikipedia.org/wiki/Philippe_ ... uteclocque

¿Los españoles republicanos integrantes de La Nueve fueron unos idealistas? Si nos atenemos al recibimiento que tuvieron en suelo francés, todo hace indicar que eran de otra fusta. Con un cierto adiestramiento y unas ganas terribles de combatir a Hitler y los otros tres dictadores europeos, fueron suficiente para luchar y llevar sus esfuerzos hasta más allá del 25 de agosto de 1944: un repaso de sus campañas y sus batallas permiten comprender quiénes fueron. Como siempre, porque me gusta, es la intrahistoria la que se nos ofrece como seductor, más allá de los libros de Historia. Evelyn Mesquida, de manera fácil, nos recupera la Memoria de esos hombres.

Sigo leyendo,

[Aben Razín]

Segunda Parte: Paisaje de hombres en guerra.

Por si alguien quiere leer esta obra, no voy a contar el destino y el final de la Nueve que, igualmente, mueve al pensamiento, a la rebelión y a la memoria de estos republicanos que se jugaron la vida por todos. Es interesante, saberlo y obligatorio, no olvidarlo. Tras esto, viene una parte que me atrae y es la vida de aquellos que, parece, pudo entrevistar la autora.

Estoy con el primero de ellos que es Germán Arrue Calvo:

Un homenaje de su pueblo,

(xxx = com)

Personalmente, esta parte me atrae mucho porque añade un punto de vista al relato que no figura en ningún lugar de los libros de Historia. Es decir, están en mi amada intrahistoria. Aquí resurgen las intenciones y los deseos de aquellos que fueron. Por cierto, el primer testimonio también estremece en su primera parte hasta que se alista a La Nueve.

Sigo leyendo,

[Aben Razín]

Terminado.

Antes que nada, quiero reseñar que la parte de los testimonios se lee con enorme facilidad, ya que son transcripciones de entrevistas que ayudan a comprender esa historia de unos hombres que lucharon con unos ideales muy férreos en condiciones precarias, tras pasar verdaderas penurias. En este sentido, por la intrahistoria, creo que merece la pena la lectura de esta obra que está muy bien escrita y que atrae, en todo momento, la atención del lector.

Por supuesto, no quiero destripar nada de lo que se cuenta, porque es cierto que es un periodo de la historia que ha sido contado y estudiado en pocas ocasiones. No obstante, en lengua francesa, se pueden encontrar testimonios y autobiografías de algunas de los actores de esta parte de la II Guerra Mundial.

Como he dicho, merece la pena. Abrir las páginas de esta obra es ya un acto de homenaje a estas personas que, en la mayoría de los casos, han fallecido. Sólo van quedando papeles y relatos de sus descendientes que nos pueden acercar algo a lo que ahí sucedió.

Saludos,