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Continuamos nuestro recorrido por los relatos escritos en este primera década del siglo XX con el del escritor Hjalmar Söderberg (Estocolmo, 1869 - Copenhague, 1941).
Narrador sueco, autor de novelas psicológicas en las que destaca la descripción del Estocolmo finisecular, trasfondo de temas pasionales que reflejan un depurado racionalismo y que fueron motivo de escándalo entre los sectores puritanos.
Su obra se caracteriza por el pesimismo, la fina ironía y la resignación. La imposibilidad del amor y "la incurable soledad del alma" son sus temas principales. Fue un polemista agudo y un observador exacto y sin ilusiones; pero la visión desapasionada y la distancia analítica nunca excluyen en él la comprensión y la simpatía profunda. Su estilo, parco y preciso, está cuidadosamente trabajado; su tono firme y frío (y por ello ajeno al fasto y a la opulencia fantástica y verbal de la literatura neorromántica del último decenio del siglo XIX) reflejó la Estocolmo de los primeros años del siglo XX, capital idílica y tranquila que se iba transformando en gran ciudad moderna. Las descripciones de Estocolmo son destacables por la recreación de ambientes y la riqueza léxica. Fue considerado el mejor estilista de su época y un maestro del género corto.

Comentarios en este hilo a partir de mañana viernes.

Pues lo he leído hoy en el metro, mientras venía a currar (se lee en 5 minutos).

Me ha gustado mucho, mucho más que el de Lovecraft (aunque ya sé que la comparación es absurda, me gusta comparar la primera experiencia del miniclub con la segunda, qué queréis).

Me gusta mucho:

1-Cómo plasma ese fenómeno tan absurdo que nos lleva a los seres humanos a dar por ciertos y verdaderos como hechos lo que no son más que juicios mentales que nos hemos montado en la cabeza sobre las motivaciones de los seres humanos que nos rodean. Cuando estudié me gustó mucho la microsociología de Goffman, porque habla de eso mismo, del teatrillo que es la vida y cómo actuamos muchas veces en función de lo que creemos que piensan los demás, sin intentar contrastarlo.
2-Que lo plasma de forma muy breve y, en el fondo, muy socarrona. Sin que el hecho de que haya sido escrito hace un siglo lo lastre ni en formas ni en el fondo (se podría hacer un relato similar ambientado en 2018 cambiando unas cuantas palabras y que la situación de seducción fuera más abiertamente sexual).

En resumen, que me ha gustado mucho y me ha hecho sonreír en el metro a las 7 de la mañana, lo que no es fácil. Una joyita, que me incita a no dejar pasar ni uno sólo de los relatos del miniclub, y me hace estar contento de que me invitarais y haber aceptado.

No pongo más cosas hasta ver qué decis los/as demás.

Bueno, pues otro que está encantado con su lectura. Lo he disfrutado ya como tres veces y su desenlace me sigue produciendo cierto pellizquito de placer en las tripas.

En escena dos jóvenes sentados sobre un saliente de tierra que ataca al mar, contemplando la puesta de sol. Pese a que el tema invita a juntar palabras románticas y a inundar el texto de colores y epítetos, el autor utiliza el tono sobrio, frío y distante del que se nos advierte en la reseña de más arriba para, de esta forma, crear un sólido contraste entre la presentación y el nudo y el cándido final que nos regala. Porque piensan en darse un beso pero no se deciden, cada uno por lo suyo: el primero parece que ha aterrizado allí por error, que lo han tirado desde un avión y ha caído junto a la chica abriendo a tiempo su paracaídas. Y, no, no es de ella de la quien está perdidamente enamorado, se nos dice... Por su parte, la chica aguarda el beso porque como dice M. Corleone parece que es lo que toca según los convencionalismos por los que a veces nos dejamos llevar. Sin embargo tiene claro que en cuanto aquel la bese se levantará ofuscada, le pegará una torta al chico y se marchará del sitio.... ¡Por favor, una chica de su posición siendo besada por un simple estudiante...! El final son luces en el cielo. Fuegos artificiales. La primera cucharadita que se le arranca al tocino de cielo es ese final. Un chino para el autor: . Supongo que es así como se desarma a una mujer: si te hace una pregunta trampa le respondes -mirándola fijamente a los ojos- que sí, que a veces piensas hay vida más allá de la muerte. Luego la rodeas con un brazo y, finalmente, aprovechando que el sol se esconde y asoma la luna por el saliente de piedra que mira al mar, la besas... Tomo nota, lo hago mío y ya os diré si el método sigue resultando efectivo a día de hoy.

Pues coincido contigo Corleone (y por eso lo escogí) por su aparente simplicidad y por lo bien, en mi humilde opinión, que está escrito y descrito todo.

Una joven pareja, lo que piensa él, lo que piensa ella y lo que se dicen y ocurre al final.

A mi también me arrancó una sonrisa cuando lo leí (y releí).

Tolo, ya contarás ya...

Tolomew Dewhust escribió:¿A ti aún no te he hablado de la Playa de las Mujeres, no, Giada, ?

No... pero miedo me da

Tolomew Dewhust escribió:Supongo que es así como se desarma a una mujer: si te hace una pregunta trampa le respondes -mirándola fijamente a los ojos- que sí, que a veces piensas hay vida más allá de la muerte. Luego la rodeas con un brazo y, finalmente, aprovechando que el sol se esconde y asoma la luna por el saliente de piedra que mira al mar, la besas... Tomo nota, lo hago mío y ya os diré si el método sigue resultando efectivo a día de hoy.[/spoiler]

Jajajaja, entre lo del "tocino de cielo" y este párrafo estoy muerto de risa.

Pues oye a mí tambien me ha gustado pero sobretodo porque son situaciones en las que cualquiera se ha visto en su juventkd.

¿ me besará o no? ¿ cuando y como lo hara si es que lo hace? Lo de la pregunta que tanta gracia hace pues hoy día seguro que con los nervios se dicen cosas tanto o más fuera de lugar...

Leído y me ha gustado mucho. ¿Quién no ha vivido esos momentos previos al beso y que a veces se disfrutan casi más que el propio beso?

Y por otra parte, las ideas de cada cual sobre el otro, que nos influyen más de lo que pensamos y muchas veces nos hacen tomar decisiones equivocadas o perdernos de vivir algo.

Ya nos contaréis si sigue funcionando el método del atardecer y del bracito

Qué maravilla!! cómo en tan pocas palabras se pueden reflejar tan bien los nervios ante el primer beso y la inocencia de la juventud. Como ya han dicho por arriba, todos hemos experimentado sensaciones parecidas en algún momento y me ha hecho recordarlas con ternura y un poquito de nostalgia.

Bueno, lo he leído en pocos minutos porque es bastante corto. Me ha gustado más el de Lovecraft (aunque me excuso diciendo que tengo cierta fascinación por el relato fantástico), pero me pareció un cuento bastante tierno, muy bien plasmados los nervios del primer beso.

Lo voy a leer otra vez ya que me ha desconcertado mucho el primer mensaje del hilo. No sé qué tiene que ver el resto de la obra del autor con este relato corto.

Caroline escribió:Lo voy a leer otra vez ya que me ha desconcertado mucho el primer mensaje del hilo. No sé qué tiene que ver el resto de la obra del autor con este relato corto.

A mi también me sorprendió lo del pesisimismo... O yo no entendí nada o el relato me pareció tierno.

Y no solo el pesimismo, rescato algunas frases que me han dejado fuera de juego

destaca la descripción del Estocolmo finisecular,

el pesimismo

reflejó la Estocolmo de los primeros años de la actual centuria, capital idílica y tranquila que se iba transformando en gran ciudad moderna. Las descripciones de Estocolmo son destacables por la recreación de ambientes y la riqueza léxica.

Yo he leído algunas obras de este autor y nada de lo que refleja el relato tiene nada que ver con el copiar-pegar del primer comentario del hilo.

Por eso digo que lo leeré otra vez, a ver si le pillo el punto. Doctor Glass, una de las más conocidas del autor, es una joya de libro.

Me ha encantado este relato, y también me ha hecho esbozar una sonrisa.

Es breve pero dice muchas cosas.

El chico quiere besarla pero no dabe por qué, idiota porque te gusta y estás enamorado aunque haya otras más guapas, aunque haya una inalcanzable y perfecta pero que en el fondo no te dice nada, si no lo intentarías, porque pones la excusa de su posición social y la cercanía de su padre, porque tenes que te rechace, y por otras cosas más, pero en el fondo estás coladito por ella. La chica quiere que lo bese porque lo quiere, pero para no admitirlo ante sí misma pone la excusa de que en realidad es para despreciarlo, porque es un pobre estudiante, porque en realidad no es tan guapo, porque... En fin, llegado el momento del beso todas las tonterías, prejuicios, inexperiencia, etc..., quedan atrás porque el amor es el amor, y que hay nada mejor que un beso de verdad, de enamorado y no el del idiota del teniente, para demostrarlo?