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La duda deja su sombra
la sombra deja su duda
y cuando se leva el ancla
no hay travesía segura
la duda deja una sombra
que más de mil años dura
no hay fuego que queme el sueño
que por las noches alumbra.
La duda deja su sombra
la sombra deja su duda
el miedo mueve los pasos
si el camino se bifurca
la duda deja una sombra
que nunca entra en disputas
firma, con bravo sigilo,
las lágrimas de una en una.
Al alba la duda se vuelve tormento
de noche la duda se torna fulgor
rocosa es la duda que muerde por dentro
insulsa la duda muerta sin razón
anuda la duda dos sueños inciertos
negados a verse sin miedo o pudor.
La duda deja su sombra
la sombra deja su duda
cuando se mueren los vientos
la mar se queda desnuda
la duda deja una sombra
sombra que muere impoluta
bien cuando cesan los sueños
bien cuando cesa la duda.
La duda
Re: La duda
Dudo de si querías matarnos asfixiados. 
La repetición de los dos primeros le da ritmo, pero la del duda y sombra tan machaconamente acaba por convertir el poema en trabalenguas y hace perder un poco la distancia y el sentido.
La repetición de los dos primeros le da ritmo, pero la del duda y sombra tan machaconamente acaba por convertir el poema en trabalenguas y hace perder un poco la distancia y el sentido.
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Re: La duda
lucia escribió:Dudo de si querías matarnos asfixiados.
Reconozco que lo escribí por experimentar el juego con las sílabas y las palabras, pero no seguí por esa línea (y veo que para bienlucia escribió:La repetición de los dos primeros le da ritmo, pero la del duda y sombra tan machaconamente acaba por convertir el poema en trabalenguas y hace perder un poco la distancia y el sentido.
)Gracias por comentar
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