Gracias por el esfuerzo de releerlo, jilguero
Lo valoro mucho.
Y gracias de nuevo por tu sinceridad.
jilguero escribió:Lo primero que quiero decirte es que, si bien sigue sin entusiasmarme, al menos esta vez no me ha producido la pereza como lectora que experimenté en la otra relectura. Señal que la pereza venía motivada por la situación, porque había otros textos que me estaban atrayendo más (componente subjetivo de escaso valor).
He dicho varias veces que un inicio que no engancha es una sentencia de muerte para un texto, más que nada porque levantarlo de nuevo y que el conjunto guste es muy difícil. Puede hacerse, pero para qué cansar al lector y al propio autor.
Entiendo que te haya parecido aburrido y no lo suficientemente interesante como para hincarle el pico más veces. A todos nos ha pasado leyendo determinados textos. Sabiendo que esa es la sensación que he provocado, lo tendré en cuenta, porque dar pereza es una de los peores defectos
jilguero escribió:Lo primero es que creo que la historia la podrías haber contado con bastante menos texto y eso, la brevedad, cuando un texto no es obvio ni la prosa sencilla, creo que es fundamental. Si el texto es oscurito pero breve, la curiosidad se impone sobre la pereza, pero si es oscurito y largo puede ocurrir que ocurra lo contario.
Ya estamos con los recortes
Sí, hay texto de sobra, especialmente en la primera parte. Pero es que quería dar un toque siniestro, gótico, descriptivo sin describir una habitación oscura de la forma habitual. Quería ambientar y situar al lector en una especie de cuento terrorífico que se está contando junto a la chimenea.
Normal que canse tanto barroquismo, pero a mí me gusta
¿Por qué decir que la noche cae con su falda de no sé qué y blablabla... y que una mariposa no sé cuántos y que un reloj da las tres? Lo que pretendía aportar era descripción de la sala + ambientación oscura.
Pero vale, lo anoto
jilguero escribió:
Otra sensación que he tenido es que has mezclado dos lenguajes distintos y, para mi gusto, el más sencillito y dinámico era el adecuado. Y relacionado también con esto, he tenido la sensación que metes frases de estas que yo llamo narcisistas (el autor se gusta y se recrea), porque son poéticas y bellas pero que no aportan demasiado a la historia
Cierto que la mezcla de lenguajes desequilibra y confunde. Anoto también.
Cierto que esa segunda parte la escribí escuchando el
Lamento de Dido una y otra vez (fueron 20?) en bucle mientras escribía. Te lo juro. Al más puro estilo psicópata. Nunca escribo con música. Pero es vez dije, venga, va, en honor a jilguero me pongo esto a ver si me arranca.
El narcisismo va conmigo. Eso no voy a cambiarlo. Me gusta leerme y me gusta gustarme. Si le gusto a otra persona, ya se cierra el círculo. Como a todos, yo creo. A quién no le gusta gustarse?
Me recreo. Soy culpable. Pero obstinada
jilguero escribió:como lectora, las que a mi me embelesan son las mujeres como esa que tú conoces: esa que se abraza a los árboles y que ha vivido muchas vidas y en casi todas ha sido tierra.
Entiendo que a cada uno le gusta encontrarse con un tipo de personaje que hace sus delicias. Su ídolo o su reflejo o su anhelo o su heroína. Pero hay personajes, pobrecitos, que merecen un espacio de atención. Hay personajes fúnebres que deben aflorar... y ahora estoy pensando en aquel cementerio de Noceda y se me hace la boca agua. Tienes personajes e historias bestiales.
Gracias de nuevo por tu labor