Las cavilaciones de Juan Mute | el hombre del saco, el pervertido. Para ello recurren a la vieja máxima de mostrarlo con un aspecto repulsivo desde el principio, asimilando aspecto desagradable con malas intenciones. Está claro que el acercamiento y el hablar de chicas es para intentar excitarlos, pero son demasiado niños, demasiado inocentes para captarlo, de hecho uno de ellos se va a cazar un gato. Cuando vuelve el hombre ha cambiado de táctica y entonces se recrea en lo que le gustaría hacerle al travieso, parece que se le hace la boca agua de pensarlo...., el niño acaba huyendo sin saber exactamente el por qué se le han despertado todas las alarmas. |
Esa parte final la veo lograda y, en mi opinión, salva al texto de pasar desapercibidoArden escribió:Pues me ha gustado el cuento.
Primero el ambiente del Dublín de la época. El colegio privado con el cura vigilando que no lean las novelitas del Oeste. El afán de aventuras de los niños, sus juegos,..., hasta aquí todo muy inocente.
La segunda parte ya es otra cosa, muy inquietante. El autor te cuenta sin contarte, dice sin decir. Todos tenemos en mente qué significa ese hombre de ojos verdes, lo que las madres llamabanComo en relatos en los que aparece el diablo, recuerdo uno de Hawthorne del estilo, aquí el diablo viene en forma de hombre, y sin decir claramente las cosas Joyce nos transmite el desasosiego del niño y el agobio que padece y que nos traslada.
el hombre del saco, el pervertido. Para ello recurren a la vieja máxima de mostrarlo con un aspecto repulsivo desde el principio, asimilando aspecto desagradable con malas intenciones. Está claro que el acercamiento y el hablar de chicas es para intentar excitarlos, pero son demasiado niños, demasiado inocentes para captarlo, de hecho uno de ellos se va a cazar un gato. Cuando vuelve el hombre ha cambiado de táctica y entonces se recrea en lo que le gustaría hacerle al travieso, parece que se le hace la boca agua de pensarlo...., el niño acaba huyendo sin saber exactamente el por qué se le han despertado todas las alarmas.
Me ha gustado.
. Las cavilaciones de Juan Mute 
... se lee bien, 
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.La primera mitad del relato, casi anodino, no despierta la curiosidad del lector (al menos no la mía), algo diría que imprescindible en un texto tan breve, pero es que, cuando aparece el personajazo ese que parece que tiene todo el levante de Cádiz en la azotea, y se le ve cierto color al asunto, coge y termina el cuento,  . |
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Eso lo pienso yo muy a menudo cuando leo ciertas cosas...Tolomew Dewhust escribió:Bueno, aparte de que se lee bien no sé qué más decir sobre el texto, así que seré súper breve...
Es que no sé qué más añadir. Me alegra que otros le veáis colorcillo al asunto y lo hayáis disfrutado pero lo cierto es que ni la manera en que está narrado ni el meollo del cuento me seducen como para por ejemplo apuntarme el nombre del autor y seguirle luego la pista. Vamos, que ha tocado en hueso conmigo...
Anoche se me pasaba por la cabeza que si alguno de estos textos que estamos leyendo se presentaran en cualquiera de los concursos de relatos del foro, los íbamos a poner finos filipinos entre unos cuantos, caña de la buena,
A ver el siguiente,
La primera mitad del relato, casi anodino, no despierta la curiosidad del lector (al menos no la mía), algo diría que imprescindible en un texto tan breve, pero es que, cuando aparece el personajazo ese que parece que tiene todo el levante de Cádiz en la azotea, y se le ve cierto color al asunto, coge y termina el cuento,
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