Como vengo repitiendo hasta la saciedad, El problema de los tres cuerpos no lo he leído. He llegado a esta novela (segunda de la saga) porque la serie de Netflix de 8 capítulos me la bebí en día y medio, y, literalmente, me hizo estallar la cabeza.
Me fui a Amazon, me hice con El bosque oscuro en mi kindle y no me arrepiento en absoluto.
No conocía la manera de escribir de este autor y me ha sorprendido, por un lado, su lenguaje llano (no pobre), pero sobre todo la capacidad de convertir al héroe en villano en tan solo dos páginas, y luego darle la vuelta al asunto tres páginas después para volver al punto inicial un poco más adelante. Sin perder un ápice de credibilidad. El argumento es sólido, apenas señalaría como pega lo que más arriba menciona en spoiler asangrefría.
En cuanto a los puntos fuertes: la imaginación, desbordante.
En cuanto a las cositas no tan positivas de la novela pondría su extensión, o, más bien, la extensión mal repartida en el desarrollo de los diferentes nudos argumentales.
Por ejemplo, el prota mantiene una relación imaginaria con el prototipo de su chica ideal, y se suceden páginas y páginas contándonos qué sintió al verla por primera vez (al imaginarla, porque no es real), o cómo los dos miraban absortos el reflejo de la llama de la hoguera en la copa de vino que mantenía ella en su mano, o un viaje que hicieron en coche a no saben ni ellos dónde... Y, cuando quiere, en tres páginas avanza siete años, o liquida la flota estelar (dos mil naves) en tres minutos de lectura. |
Me ha traído a la memoria la Saga de Ender. Recuerdo que la primera novela de aquella saga la finiquité en un fin de semana, y en seguida comencé su continuación. Pero luego se me hizo algo de bola Ender el xenocida y no digamos ya el siguiente...
Sin embargo aún no me he aburrido de esta, y ya tengo en mi kindle El fin de la muerte,
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