Pues querida
@Babel , ¡está bastante bien!
Ya he leído el primero, y es bastante ameno y agradable. Es la historia de Wiktor, un chaval que en su juventud visitaba a las Wilko (un porrón de hermanas, creo que 6 si no recuerdo mal) asiduamente dado que vivían cerca de sus tíos, y flirteaba con las mayores y daba clase a las pequeñas. Flirteaba así en plural. Se nos va a la guerra y se hace soldado, y luego pos se queda al cuidado de una granja.
Le conocemos en ese momento, cuando visita a un psicólogo porque tiene como mal cuerpo y pesadillas y crisis existencial (está próximo a los 40, le disculpo y comprendo por ello) y echa de menos a un amigo que recientemente ha fallecido, el único que se da cuenta que tenía.
Asín que vuelve a visitar a sus tíos, han pasado 15 años, y el rufián na más entrar por el caminito del pueblo de acuerda de las 6 hermanas, a las que ha tenido totalmente olvidadas 15 años. Qué petardo.
Y se va derechito cual flecha a visitarlas, antes que a sus tíos, porque de repente le entra picorcillo. Tú sabes.
Y ahí pues ale, que le da por descubrir muchas cosas personales mirándose al espejo del presente y el pasado de cada una de las hermanas que, por otro lado, lo han estado echando mogollón de menos.
No te cuento más por si lo lees. Pero me muero por comentar las cositas que pasan, los detallitos psicológicos truculentos, las cositas del amor y de la tontería, y lo densito que es este tipo que tengo yo la sensación de que pasa por la vida arrastrao por la corriente cual piedra de río. ¡Qué coraje!
En cuanto al cómo está escrito, es curioso, porque las palabras a final de párrafo no tienen guión, y esto es todo lo más reseñable que puedo destacar