La pianista - Elfriede Jelinek

[Gretogarbo]

Voy por la página 61/285 (21%) y le doy una moratoria de 20 páginas más, que son las que me ocuparán en mi regreso a casa tras la jornada laboral. No recuerdo haber abandonado jamás una lectura, ni siquiera la de mi único Paulo Coelho, pero no veo de recibo que la autora se tire diez páginas filosofando sobre la ropa y otras diez hablando de lo que se cuece en un peep show sexual; tengo semen hasta en las orejas y no es mío. Tampoco me interesa en exceso el hecho de que la pianista se tenga que conformar con rozar con la mejilla el paquete de su primo, comprimido en un minibañador, cuando lo que desea es besarlo.

¡Será por libros!

[Ivanovich]

Eres un flojo.

Yo también lo dejé hace uno años, una o dos veces, que ya no recuerdo si la segunda lo terminé. Lo dejé por desagradable, no era el momento, a pesar de que la el lenguaje corto, seco y brutal de Jelinek me parecía muy bueno, y el tema de fondo muy interesante. En la reciente lectura, la definitiva, se me ha hecho un poco árido. Pero este es de esos libros que dejan cierta estela, para mí al menos. Bonito no es.

[Gretogarbo]

Eres un flojo.
Yo también lo dejé hace uno años, una o dos veces, que ya no recuerdo si la segunda lo terminé. Lo dejé por desagradable, no era el momento,...

Seré un flojo, Ivanovich, pero no me aporta nada esta lectura. Y no es porque me parezca soez hablar de coños húmedos o pollas duras si están en el contexto pero no le encuentro sentido el colar en un párrafo el efecto secante y curtidor del ácido silícico en los labios de una vagina sin que venga a cuento, por poner un ejemplo.

[Ivanovich]

Nah, lo de flojo era una broma. Te entiendo, Greto.

[Aben Razín]

Después de vuestro careo, estoy por darle de baja en mi lista de pendientes,

Como dice muy bien, Greto ¡será por libros!,

[Ceinwyn]

Amigos, después de 70 páginas leídas, mi única opinión de momento es que esta señora tenía alguna patología mental,y de ahí este libro. Vamos, es que parece que ella es Erika. Sabe perfectamente todos los matices. Y la forma de narrarlo es como patológica, no sabría decir exactamente por qué. Quizás porque parece que te habla y te escupe, como que te está haciendo partícipe de lo que está pasando y tú eres una mirona asquerosa que no haces más que disfrutar de esa mierda.

Ummm no sé. Me parece muy inquietante. Y creo que es algo bastante incómodo, pero meritorio a la vez, aunque tengo la sensación de que ella tampoco tiene mucha intención premeditada en la cabeza.

Pero igual sí, y es una escritora de la hostia y todo está más que medido, y es una tipa con un historial médico impoluto, y simplemente sabe documentarse y tiene la habilidad de escribir esos textos de esa manera.

¿Alguien se moja conmigo?

Aunque antes de venir aquí a vomitar todo esto, hubiera estado genial que me pusiera a investigar sobre esta mujer y quién es, y qué ha sido de ella y su vida, y sus otros libros y todo eso. Es que entro virgencita a esta lectura y simplemente os cuento lo que me provoca.

Pero ahhh tendrá que ser otro día, porque tengo mucha prisa que me voy a trabajar.

Ale adiós. Decidme cosas bonitas pa que cuando venga a leeros me alegre.

[woki]

Amigos, después de 70 páginas leídas, mi única opinión de momento es que esta señora tenía alguna patología mental,y de ahí este libro. Vamos, es que parece que ella es Erika. Sabe perfectamente todos los matices.

Se supone que es bastante autobiográfico, sí.

Aunque antes de venir aquí a vomitar todo esto, hubiera estado genial que me pusiera a investigar sobre esta mujer y quién es, y qué ha sido de ella y su vida, y sus otros libros y todo eso.

Imagino que quien desee comenzar por algo más ligero (es un decir hablando de Jelinek) puede hacerlo con Los excluidos y ya de ahí pasar a La pianista. Es casi igual de bueno pero más accesible.

Decidme cosas bonitas pa que cuando venga a leeros me alegre.

Cosas bonitas? Reserva la petición para cuando te pongas con Deseo.

[Gretogarbo]

¿Alguien se moja conmigo?

Si es para pasear por la orilla del mar, me apunto. El libro ya está en la mochila para devolverlo a la biblioteca.

[Jeeves]

Cuando alguien dice que una lectura le parece “inquietante”, como hace @Ceinwyn, para mí es como un toque de corneta o la sirena de una fábrica: hay que acudir corriendo. A ver si me quito algo de peso de trabajo y cojo el libro. Además, me interesa porque, si la película ya era incómoda y la vivías con un malestar constante metido en el cuerpo, el libro —por lo que leo por aquí— es más explícito y da para más libertad y atrevimiento, tanto en el texto de la autora como en la imaginación del lector que se deriva.

¿Será hiperrealismo?

Tiendo a clasificar las cosas, siendo consciente de que la mayor parte de las obras que leemos no pueden meterse en cajones estancos, pero así funciona mi cerebro.

Sigo vuestras lecturas y también vuestros abandonos.

[Ivanovich]

Amigos, después de 70 páginas leídas, mi única opinión de momento es que esta señora tenía alguna patología mental,y de ahí este libro.
(…)
Ale adiós. Decidme cosas bonitas pa que cuando venga a leeros me alegre.

Empiezo por lo último. Amigaaaa, qué salada que eres!!! Vale, sigo, algo de eso que dices hay. Como dice Woki, tiene mucho de autobiográfico, la madre de Jelinek fue una mujer controladora. Cuando termines la novela te paso el artículo al que me refería en este hilo publicado en una revista de Neuropsiquiatría, que utiliza La Pianista como hilo para tratar los temas de autodestrucción, sadomasoquismo, alexitimia, incapacidad de vivir en el propio cuerpo, etc…, creo que es interesante.

Te pongo un enlace a una entrevista, y copio aquí una parte (kom x com):

https://estoespurocuento.wordpress.kom/ ... ntrevista/

–Su educación no deja de ser increíble: piano, violín, guitarra, danza …

–Mi madre tenía para mí una ambición artística desmesurada y el deseo también de seguir controlándome a través del conservatorio, la danza clásica que tomaban la posta cuando ella no se encontraba. Desde la edad de siete años mi jornada comenzaba a las once de la mañana y terminaba a las diez de la noche, porque yo debía trabajar mis instrumentos. Uno solo no era suficiente, tenían que ser cinco, a los cuales se agregaban la música de cámara y la orquesta … Su sueño era que yo fuera música.

–¿Usted era una escolar más bien dócil, y sin embargo cuenta que siendo niña se tiraba de cabezazos contra la pared?

–Como un animal enfermizo. Como yo debía estar casi todo el tiempo sentada trabajando, desde muy jovencita comencé a caminar en mi cuarto y a darme de cabezazos contra la pared. Mi madre a pesar de todo empezó a tener miedo. Así que un día aterricé en los servicios del doctor Asberger, pedopsiquiatra célebre que ha dado su nombre a un forma de autismo que afecta a seres geniales pero socialmente inadaptados. Ciertamente yo no era una niña genial, pero presentaba trastornos serios.

–¿Usted acumula entonces un odio que la propulsará, dice usted, como un proyectil hacia la literatura?

–Si desde muy pequeña se está a merced del poder omnipotente de sus padres, en la ocurrencia, el de mi madre, la presión no hace más que acumularse al interior. Y cuando una ya no se lanza contra las paredes hay que encontrar otra cosa. En mi caso fue la escritura. Yo ya escribía desde muy niña. Y desde que aprendí a leer, muy niña también, jamás he dejado la lectura.

Reserva la petición para cuando te pongas con Deseo.

Uf, si La pianista es tremenda, Deseo ya es una cosa aparte. Sin argumento reconocible, sin personajes, escenas encadenadas de dominación sexual, machismo y sumisión, eso es lo que recuerdo. Y que en el metro una mujer, al ver que leía ese libro, me preguntó si era interesante y que de qué trataba, que le interesaba Jelinek pero no había leído nada.

¿Será hiperrealismo?

En la entrevista a la que vinculo más arriba, ella habla de eso, y de la estética que impregna a su narrativa, que es muy particular, para mí seca, dura, corta, brutal, presente.

Habría usted inventado una nueva forma de realismo?

–Capaz un hiperrealismo. La realidad está ahí haga lo que se haga. Pero no se puede aprehenderla más que con la ayuda de una estética especial (…)

[Babel]

El hecho de que sea autobiográfico, aunque sea en parte, hace doblemente interesante la lectura porque este este tipo de enfermedades tan difíciles de entender, contadas por alguien que las padece y con capacidad para explicarlas, nos acerca mucho más que cualquier texto aséptico de alguien que las estudie.
Es decir, en un texto la puedes comprender, aquí la sientes, y ese es el gran logro de Jelinek.
Para personas interesadas en comprender el comportamiento humano este tipo de libros son reveladores.
Quizá por momentos desagradable también, porque es profundamente visceral.

[asangrefria]

Lo he comprado.

En un principio pensé, pues ya que lo está leyendo gente por aquí podría ponerme. Luego vi esos bloques de texto, unido a esa temática que a uno le levanta el espíritu solo de pensarla y quizás debería buscarle una época más propicia (porque ahora mismo me están costando hasta los bestsellers que se leen prácticamente solos)

[woki]

El libro ya está en la mochila para devolverlo a la biblioteca.

Mucha gente abandona su primer libro de Jelinek y después la acaba adorando. A mí personalmente no me pasó, pero sé que es común. Claro que si dices que has sentido que era gratuitamente escatológica, puede que simplemente no conectes artísticamente con ella. Yo también odio esa sensación, aunque con Jelinek nunca la tuve.

[Ceinwyn]

Gracias a todos por ayudarme a aclarar mis dudas.

No sé si llegaré a leer "Deseo" pero sí voy a acabar este, por supuesto. Creo que este libro es bastante interesante y más ahora que sé que en parte es autobiográfico, y que era lo que me imaginaba. Adentrarse en esta mente creo que es un buen ejercicio, por muchas cosas, pero entre otras, por trabajar la empatía de ponerse en los pensamientos de alguien que tiene la cabeza tan destrozada.

Creo que es importante que la literatura te incomode, y encontrar placer y disfrute de alguna forma en esa incomodidad que es lo que al final hace que podamos recibir del mundo y modificarnos nosotros, disfrute por esto, por tu experiencia como individuo vivo en una sociedad de la que no podemos desvincularnos, no por el placer de leer un corte, o una escena sexual, claro. Yo encuentro placer en ir más allá en otras realidades, otras formas de ver la vida. Creo que es importante a nivel global como personas. Entiendo que no sea igual para todos, claro que no, y que hay muchas formas de incomodarse leyendo para cambiar nuestro pequeño mundo, por supuesto.
Sólo digo que para mí esto es un reto bastante de agradecer, que esta literatura tan descarnada tiene sentido.

Otra cosa es que por no pronto, no me gusta la narración, ni cómo está escrito. La entendería mejor escribiendo un ensayo, o quizás haciendo poesía por alguna de las metáforas y figuras que dibuja, pero no una novela. Cuando nos enfrentamos a una novela el cerebro espera otra cosa. Quizás ella vomita lo que la da la gana y luego los editores lo etiquetan. No lo sé. Pero por lo pronto yo no le hubiera dado el Nobel de literatura. No me parece buena escritora aunque sí tenga mucho en el cerebro para contar, y tenga claro cómo contarlo.

[natura]

@Ivanovich, te acabo de mangar el enlace a la entrevista que has dejado para ponerlo en la ficha de Jelinek en Autores. Me ha parecido una charla muy interesante que revela muchas cosas de su vida y su forma de escribir. Muchas gracias por dejarlo, compañero

Y os dejo seguir con alguien tan polémico y que despierta tanto debate. Os está quedando un MC genial.