Rematado. Y tengo sentimientos encontrados.
La historia me ha parecido magnífica: tres hermanas solteronas, de recio abolengo, venidas a menos, hasta el punto de no tener ni para pagar al trabajador de sus tierras que se mantiene con lo poco que saca de lo que cultiva para sus amas y para él. La dignidad y lealtad de este hombre, de nombre Efix, es total de principio a fin de la novela. Por medio, amores reprimidos, pasiones ocultas, matrimonios de conveniencia y mucha, mucha naturaleza.
Sin embargo, la narración me ha resultado algo deshilachada y reiterativa por momentos, perdiéndose en ocasiones por vericuetos que nada aportan. A mayores, algunos errores gramaticales y ortográficos ya comentados por ahí arriba.
Como dije en mi
primer mensaje, leyendo algunos pasajes me acordaba de doña Emilia, pero con menos calidad. Sin embargo, la Deledda fue Premio Nobel y la Pardo Bazán no pasó de académica de la Real Academia Gallega, aún habiendo escrito toda su producción literaria en castellano. Cosas que ocurren.
Recuento 2024
Ayer: Recursos inhumanos. Pierre Lemaitre
Maldita tesis. Tiphaine Rivière
Hoy: Ante el espejo. Veniamín Kaverin
Lo que más me gusta son los monstruos (1). Emil Ferris