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el cura ya ha descubierto lo que unía a Winterfield y a la señorita Eyrecourt Menudo está hecho, llega a resultar incluso empalagoso en su afán de conseguir la abadía esa.
Te puedes quedar sin conversación, pero nunca te quedarás sin canciones Lemmy
El jesuita lleva al extremo la frase: "el fin justifica los medios". Más adelante verás que parece la mismísma encarnación de Maquiavelo. Como se nota que Collins no sentía aprecio por la religión católica.
Ya lo he terminado, y aunque algunos personajes son tópicos en las novelas de Wilkie, y hace uso de sus golpes de efecto... ¡¡me ha encantado!! La señora Eyrecourt me encanta, por muy cargante que pueda parecer.
El padre Benwell es temible.
Winterfield el mejooor.
Romayne débil, pobre de espíritu, patético.
Te puedes quedar sin conversación, pero nunca te quedarás sin canciones Lemmy
Ya lo he terminado, y aunque algunos personajes son tópicos en las novelas de Wilkie, y hace uso de sus golpes de efecto... ¡¡me ha encantado!! La señora Eyrecourt me encanta, por muy cargante que pueda parecer.
El padre Benwell es temible.
Winterfield el mejooor.
Romayne débil, pobre de espíritu, patético.
Coincido plenamente contigo, sobretodo respecto a Romayne que me acaba pareciéndo un pobre demente.
La he acabado hace unos días y me ha gustado bastante, sobre todo la parte final. A trozos se me ha hecho un poco lenta sobre todo las historias del padre Benvell y su forma de conseguir manipular a Romayne.
Haidé escribió:Ya lo he terminado, y aunque algunos personajes son tópicos en las novelas de Wilkie, y hace uso de sus golpes de efecto... ¡¡me ha encantado!! La señora Eyrecourt me encanta, por muy cargante que pueda parecer.
El padre Benwell es temible.
Winterfield el mejooor.
Romayne débil, pobre de espíritu, patético.
Sí, pero lo dejé a la mitad porque los miniclubs me comían viva. Y lo quité del recuento. ¡¡EH!! ¡Pero lo retomo contigo! No recuerdo por dónde estaba, luego te lo digo... llevaba la mitad o poco más, creo.
Me encantan los personajes, sobre todo el padre Benwell. Es taimado, pero me gusta ese empeño que pone en todo y en salirse siempre con la suya. Es cierto que recuerda al Conde Fosco, pero con un puntito de beatería falsa que aquel no tenía.
Stella no me gusta de momento; aunque no es tonta del todo, me parece un poco pava con ese complejo de que ella no le gustará a Romayne Y éste de momento bien, aunque me ha dado rabia que huya con Arthur Penrose, pero en parte lo entiendo.
Ahora mismo tengo al padre Benwell investigando sobre Winterfield y a Stella yendo a la casa de la viuda del general