El bujío de Santa Catalina 2 (Bordeando la realidad)

[Edgardo Benitez]

Otra cosa que me llama la atención es el lugar que han escogido para reunirse, donde hay una gran escasez de plantas. Están congregados justo en la base del murete más cercano al mar. Hay alguna malahierba suelta por ahí, pero la realidad es que no hay mucho donde refugiarse y, por ende, se exponen a ser comidos por cualquier depredador que los vea.

Pero no te preocupes, Cata, que algún día me enteraré de todas estas cosas y tú serás la primera a quien se las cuente.

Entonces habrá algún ritual orgiastico en donde no les importa nada más.

[magali]

Esas dos palabras, que tú y yo hemos leído en un cuento, son muy impertinentes porque se quedan horadando en la mente del receptor.

¿Por qué? Según yo lo entiendo, el destinatario de las dos palabras tiene bien presente que ella tiene algún tipo de poder sobrenatural (estamos hablando de un cuento); por tanto, él da credibilidad a lo que una adivina sabe sobre el porvenir. Pero además, hay otra implicación: si el acepta las dos palabras como ciertas, tiene que admitir que ella también está implicada en esas palabras, puesto que no las rechaza; y tampoco rechaza que él pueda sentirse ampliamente obligado a decírselas a ella.

Quiero decir, si ella le regala las palabras, es porque ella las siente. Dada esta premisa como buena, ella solo tiene que esperar que el mensaje cale en el destinatario, tarde lo que tarde. Por eso, cuando vienen a buscarla, ella los está esperando porque sabe que el mensaje ha sido recibido.

N.B. Todo este comentario viene a colación por un cuento que @jilguero y yo leímos. Me perdonaréis la intrusión, pero no quería dejar todo esto en el hilo del cuento. Y tampoco quería que jilguero pensara que no quería responderle.

https://www.abretelibro.com/foro/viewto ... 5&t=117488

Si alguien desea leer el cuento, que me lo diga.

[jilguero]

¿Cuánto mides, jilguero? A tenor de la sombra... entre dos metros y medio y tres.

Hay mañanas, Greto, en las que me levanto con la sombra equivocada. En verano, cuando estoy en la banda de la bahía, es la sombra de un gigante microcéfalo. Dice que se llama Nabucodonosor, pero me da que ese no es su verdadero nombre.

En realidad, incluso en las mañanas de verano, tengo una estatura normalita y la cabeza de tamaño adecuado a mi cuerpo. A veces mi santacatalina me decía cabezona, pero creo que siempre lo hacía en sentido figurado.

No te asuste, pues, que esa sombra no es la mía, sino una prestada.

Esas dos palabras, que tú y yo hemos leído en un cuento, son muy impertinentes porque se quedan horadando en la mente del receptor.

Me lo tengo que releer y meditarlas. Gracias, Magali.

Entonces habrá algún ritual orgiastico en donde no les importa nada más.

Ya, Edgardo, pero ¿por qué ahí y no en cualquier otro lugar? Parece como si buscaran estar a la luz, como le pasaba a las cochinillas de la humedad. Espero algún día dar con la respuesta. Seguro que está más que estudidado. De hecho, he leído en el enlace que os puse que esta especie se usa para experimentos de feromonas.


PD: Cata, se acabó el fresco; de nuevo inmersos en ola de calor, con noches con temperaturas altas; momento de desempolvar la pamplina del intercambio de masas de aire.

[Edgardo Benitez]

Entonces habrá algún ritual orgiastico en donde no les importa nada más.

Ya, Edgardo, pero ¿por qué ahí y no en cualquier otro lugar? Parece como si buscaran estar a la luz, como le pasaba a las cochinillas de la humedad. Espero algún día dar con la respuesta. Seguro que está más que estudidado. De hecho, he leído en el enlace que os puse que esta especie se usa para experimentos de feromonas.

Pues si, imagínate, no condenó a la creación por los errores cometidos con las especies, y particular mente con nosotros los humanos, pero esa cantidad de feromonas como tú les llamas, ha sido la fuente de mis problemas, claro que ha habido aciertos, pero soy un bloque de errores por esa manera de hacer sin medir consecuencias, y claro, que tengo cerebro para pensar, pero muchísimas veces no he podido con el mandado. Por eso me he identificado con la imagen, bajo el sol y con desierto, sin importar nada más.
Las hormonas y el sistema endocrino. Es mucho de esto de lo que condeno. Habrá que evolucionar el pensamiento humano para remediar el problema.
@jilguero

[jilguero]

Aquí te dejo, Cata, uno de mis agradables encuentros de esta mañana.

Cymbalaria en escalón.jpg

Cymbalaria flores.jpg

Y hablando de encuentros. Ayer estuve con Albatross: acaban de publicare otra novela y la presentaban en la Feria del Libro. Le habría gustado conocer a tu segundo retoño: No fue posible, pero le tengo un libro dedicado por el autor para él.

ues si, imagínate, no condenó a la creación por los errores cometidos con las especies, y particular mente con nosotros los humanos, pero esa cantidad de feromonas como tú les llamas, ha sido la fuente de mis problemas, claro que ha habido aciertos, pero soy un bloque de errores por esa manera de hacer sin medir consecuencias, y claro, que tengo cerebro para pensar, pero muchísimas veces no he podido con el mandado. Por eso me he identificado con la imagen, bajo el sol y con desierto, sin importar nada más.
Las hormonas y el sistema endocrino. Es mucho de esto de lo que condeno. Habrá que evolucionar el pensamiento humano para remediar el problema.

Las feromonas son fundamentales para organizar la vida entre los individuos de una misma especie.

Y esta bien eso de que te identifiques con estos bichitos rojos que también esta mañana seguían cumpliendo con el mandato divino.

No entiendo bien, Edgardo, lo último que dices de evolucionar el pensamiento humano. ¿Te refieres a aceptar mejor nuestro lado animal o a sublimarlo más?

[Edgardo Benitez]

Aquí te dejo, Cata, uno de mis agradables encuentros de esta mañana.

Cymbalaria en escalón.jpgCymbalaria flores.jpg

Y hablando de encuentros. Ayer estuve con Albatross: acaban de publicare otra novela y la presentaban en la Feria del Libro. Le habría gustado conocer a tu segundo retoño: No fue posible, pero le tengo un libro dedicado por el autor para él.

ues si, imagínate, no condenó a la creación por los errores cometidos con las especies, y particular mente con nosotros los humanos, pero esa cantidad de feromonas como tú les llamas, ha sido la fuente de mis problemas, claro que ha habido aciertos, pero soy un bloque de errores por esa manera de hacer sin medir consecuencias, y claro, que tengo cerebro para pensar, pero muchísimas veces no he podido con el mandado. Por eso me he identificado con la imagen, bajo el sol y con desierto, sin importar nada más.
Las hormonas y el sistema endocrino. Es mucho de esto de lo que condeno. Habrá que evolucionar el pensamiento humano para remediar el problema.

Las feromonas son fundamentales para organizar la vida entre los individuos de una misma especie.

Y esta bien eso de que te identifiques con estos bichitos rojos que también esta mañana seguían cumpliendo con el mandato divino.

No entiendo bien, Edgardo, lo último que dices de evolucionar el pensamiento humano. ¿Te refieres a aceptar mejor nuestro lado animal o a sublimarlo más?

Imagínate, el mandato divino es "haz lo conveniente para ti", pero pero sublimar el pensamiento alejado de la moral sin alejarnos mucho y acercándome a la naturaleza sin acercarnos mucho. Un poco menos que angel y un poco más que mono.

[jilguero]

Aquí ando, Cata, inmersa en una ola de calor que me hace añorar ese Poniente que me obligaba a salir por la mañana temprano con mangas largas. Esperemos que Eolo no tarde demasiado en girar. Lo único bueno es que le ha dado un empujón a la pamplina del intercambio de masas de aire. No me está quedando para tirar cohetes, pero mientras la escribo me refresco.

Por lo demás, aunque tengo pendiente hablarte de la hierbamora, de momento vamos a seguir con estos bichitos lujuriosos que han tenido a bien cruzarse en mi camino y también en el Edgardo.

Resulta que algunos están tan metidos en faena que andan ya por el suelo y en zona donde corren el peligro de ser pisados. A esta parejita no la he pisado esta mañana de milagro. Se han salvado porque, al estar en la zona de congregación, iba mirando para el suelo.

En campo abierto.jpg

Y una cosa curiosa es que hoy han aparecido un montón de pequeñines. He visto que le llaman ninfas, para referirse a este estadio inmaduro por el que pasan desde que salen del huevo hasta que adquieren el tamaño, forma y pigmentación del adulto. He leído también (algo que ya sabía pero en lo que no había pensado) que la duración de esta fase de desarrollo dura menos con temperaturas altas. Quizás esa concentración a pleno solo tenga la ventaja de que el desarrollo sea más rápido y, por ende, haya menos riesgo de morir antes de hacerse mayores y poder reproducirse.

Peques.jpg

En fin, Cata, que como el resto de las especies, estas chinches rojas tienen como misión crecer y multiplicarse. A todo esto, he leído que le llaman también San Antonio y eso me ha hecho acordarme de fray Antonio, el del convento de clausura de al lado, al que este año tenemos muy abandonado. Y como no queremos que el pobre fraile acabe calenturiento por culpa de las lujuriosas chinches, le vamos a dejar aquí un amanecer en la bocana de la bahía. Justo por esta zona que se ve en la foto es por donde se está poniendo el sol estos días y hacía donde mira de forma incansable la diosa Gades.

Amaneciendo en la bocana.jpg

Un poco menos que angel y un poco más que mono.

Ese suele ser un estado de equilibrio un tanto inestable y difícil de lograr.

[Edgardo Benitez]

Aquí ando, Cata, inmersa en una ola de calor que me hace añorar ese Poniente que me obligaba a salir por la mañana temprano con mangas largas. Esperemos que Eolo no tarde demasiado en girar. Lo único bueno es que le ha dado un empujón a la pamplina del intercambio de masas de aire. No me está quedando para tirar cohetes, pero mientras la escribo me refresco.

Por lo demás, aunque tengo pendiente hablarte de la hierbamora, de momento vamos a seguir con estos bichitos lujuriosos que han tenido a bien cruzarse en mi camino y también en el Edgardo.

Resulta que algunos están tan metidos en faena que andan ya por el suelo y en zona donde corren el peligro de ser pisados. A esta parejita no la he pisado esta mañana de milagro.

En campo abierto.jpg

Y una cosa curiosa es que hoy han aparecido un montón de pequeñines.

Amaneciendo en la bocana.jpg

Un poco menos que angel y un poco más que mono.

Ese suele ser un estado de equilibrio un tanto inestable y difícil de lograr.

Ves, es lo que te digo, la orden divina es poblar el mundo, pero a qué precio. Muy buenas imágenes @jilguero

[jilguero]

Días grandes

Esta, mañana, Cata, mientras daba mi paseo matutino acalorada (esta noche la temperatura no ha bajado de 27 ºC y ni siquiera el amanecer ha sido fresco), me he estado acordando de que, hace muchos años, cuando todavía estaban vivos los abuelos y mis padres, hoy, 15 de julio, era un día grande en la familia porque era el santo del abuelo: el materno, el que era médico, pintor de mano libre y cazador de perdices con reclamo...

Al mediodía nos reuníamos toda la familia (sus dos hijas, sus maridos y los hijos de ambas: mis cuatro primos y los cinco asilvestrados, pues el sexto asilvestrado no había nacido aún) en su casa y comenzábamos a tomar los “aperitivos”. En esos tiempos de austeridad y familias numerosas de verdad, precisamente los aperitivos era el no va más, puesto que solo se tomaban en días muy señalados, como era el caso del santo del abuelo.

Recuerdo que había años en los que, como hoy, hacía mucho calor y los niños nos peleábamos por sentarnos en los escalones de la escalera principal, que eran de mármol blanco y solían estar fresquísimos. Y recuerdo la cara de felicidad del abuelo al vernos a todos juntos; y los nervios y, a veces, mal humor de la abuela, mientras bregaba por dentro para que todo estuviera a punto a la hora de sentarnos a la mesa. Mesa enorme, al estar formada por dos o tres mesas puestas una al lado de las otras y recubiertas por manteles.

Ese día comíamos una barbaridad. Y lo peor es que al día siguiente, el 16 de julio, era el santo de mi santacatalina y tocaba repetir la jugada solo que esta vez en nuestra casa; por lo que era ella, en lugar de la abuela, quien ese día andaba atacada de los nervios. Eran dos casas colindantes y eso facilitaba mucho las cosas, sobre todo los años en los que estos dos días eran calurosos: el abuelo estaba enfermo del corazón y no le venía bien acalorarse demasiado. Aun así, lo recuerdo siempre muy bien trajeado. En verano, con un traje de chaqueta de color claro. Chaqueta, por cierto, en cuyo ojal siempre lucía una biznaga en las veladas que pasábamos en el patio de su casa.

Ellos ya no están con nosotros y las dos casas han sido derribadas. Lo único que quedan ya de esos días grandes de antaño, son algunas fotografías y los recuerdos de quienes entonces éramos tan solo unos niños y no nos ha quedado más remedio que dejar de serlo y acostumbrarnos a vivir sin ellos.

Enlace

[Gretogarbo]

Bonito recuerdo, jilguero.

[Cuentos Peques]

Me encanta esta belleza de recuerdo, excelente Jilguero

[jilguero]

Bonito recuerdo, jilguero.

Hoy ando recordando el rollo de pescada tan buenísimo que preparaba mi santacatalina en tal día como hoy. Era frío y se tomaba con mayonesa. Jajaja, me están dando ganas de comer, nada más pensar en él.

Me encanta esta belleza de recuerdo, excelente Jilguero

Veo que eres hombre de palabra y de que sigues aquí leyendo mis pamplinas. Imagino que tú sigues escribiendo cuentos. Dime el nombre de uno tuyo que te guste mucho cómo te ha quedado, que me lo voy a leer.

PD: Cata, qué calor tan cansino estamos teniendo, ¿verdad?

[Gretogarbo]

Hoy ando recordando el rollo de pescada tan buenísimo que preparaba mi santacatalina en tal día como hoy. Era frío y se tomaba con mayonesa. Jajaja, me están dando ganas de comer, nada más pensar en él.

Supongo que te refieres a rollo de merluza o pescadilla (Merluccius merluccius).

[lucia]

He visto esta foto, de dos árboles inosculados, y al no encontrar tema de curiosidades de la ciencia, he pensado que igual a @jilguero le gustaba. El árbol con raíces alimenta al árbol cortado a través de las ramas fusionadas con el tronco.

[jilguero]

Hoy ando recordando el rollo de pescada tan buenísimo que preparaba mi santacatalina en tal día como hoy. Era frío y se tomaba con mayonesa. Jajaja, me están dando ganas de comer, nada más pensar en él.

Supongo que te refieres a rollo de merluza o pescadilla (Merluccius merluccius).

Sí, pero en mi pueblo a la merluza se le llamaba pescada o pescadilla según tamaño. ¿Lo has comido alguna vez?

. El árbol con raíces alimenta al árbol cortado a través de las ramas fusionadas con el tronco.

Qué curioso! Antes de leerte, al ver la foto creí que era un efecto óptimo, de la gente que pinta los troncos y los hace desaparecer en apariencia

¿Se supone que las uniones la hicieron a posta?