Un cuento encadenado

[Andromeda]

Por más que la bella doctora Ceinwyn insistiera, a Andrómeda le molestaban en extremo los androides (que no toleraba ni a los de Star Wars, vamos!)

Laura Esquivel habría tenido alguna influencia en sus letras, pero la realidad es que la menospreciaba como escritora. Finalmente, la transmisión de emociones a través de la preparación de alimentos vendría a ser un tópico ancestral, centrado principalmente en el universo budista-tibetano entre otros, como el Chamanismo, donde los brujos le imprimen también su propia energía, tanto a éstos como a las Plantas de Poder.

preparar unos frijoles para cenar en medio de un lugar en el que acaban de echar gases tóxicos

Después de haberse limpiado los residuos tóxicos intestinales con las hierbas mágicas de Andrómeda, Sam expuso su verdadera situación, apoyado en todo momento por Hyp. Mientras tanto, Ivanovich procuraba desesperadamente -entre un exquisito bocado y otro-, además de contener las lágrimas que brotaban por efecto del picante, que Andrómeda no se diera cuenta de la alocada noche que había pasado con Cein.

Sam irrumpió sin más:
-Debo deciros lo que ha ocurrido, tenéis que ayudarme ya que la suerte de Harpagón Industries y su verdadera fuente de riqueza corre un grave peligro.
-¿Tú qué tienes que ver con Harpagón Industries, Samuel? -Preguntó encendiéndose y chispeando Moranis.
-Ese ha sido un secreto hasta el momento, pero la realidad es que yo soy tu más firme fuente de ingresos.
-¿Cómo????? ¿Qué has dicho????


...
* Se reconoce la belleza superior de Andrómeda, pero ésta la cede, por extrema simpatía y reconocimiento, a Cein.

[BML]

Tras mi fachada de matón al que todo le va mal, está mi..., bueno no viene al caso explicar cómo, hay mucha gente implicada y no me gustaría destapar algo que nadie quiere reconocer.... por el momento. Pero si me obligáis, a lo mejor tengo que desvelar esta larga historia pero en otro sitio, con personas que velen por mi seguridad

Todos pensaron que Sam, inexplicablemente puesto que eran un matón de tres al cuartos, tenía guardaespaldas. Lo que no sabían es que Sam era un infiltrado en la Compañía y que pertenecía a....

[Andromeda]

...la mafia rusa, al igual que Ivanovich, quien por cierto se esforzaba en atender a las tres hermosas que se habían reunido en torno suyo, mirándolas y dirigiéndoles la palabra por turnos, in alphabetical order, no fuera a ser que alguna se ofendiese..., (aunque por debajo de la mesa acariciaba la tibia mano de Andrómeda).

No había por qué preocuparse, que las rivalidades entre Hera, Atenea y Afrodita se circunscribían a la mera ficción.

[Ceinwyn]

Después de descubrir esto (lo de la mafia rusa, claro, por que lo de que Ivánovich estuviera bastante solicitado por las féminas no es ningún descubrimiento) era bastante complicado establecer bandos, aliados, buenos o malos.

Cein, a estas alturas de la historia, necesitaba un trago.

- ¿Alguien se baja al bar?

Hyp la acompañó alegremente, seguida de BML y andrómeda, que, pese a confesarse abstemia, pensaba que era mejor bajar y que todos esos locos se las arreglaran solos.

Sam, quedó solo ante un Moranis sonriente, y un Ivánovich bastante desconcertado por el plantón.

[BML]

Cuando ellos bajaron al bar, las chicas ya no estaban, el bar estaba vacío y el camarero había desaparecido. Gritaron dentro y fuera del bar los nombre de las chicas pero no encontraron respuesta. Sam se le ocurrió que quizá el camarero estaba en la trastienda y fue a buscarlo. Entró a oscuras en la habitación, había un olor a cerrado, a aire concentrado de no haber ventilado ese antro desde el día que lo abrieron, no conseguía encontrar el interruptor cuando Ivanovich entró y encendió un mechero. Al fondo, tras la mesa, se asomaba una silueta de una persona tirada en el sillón, como dormida, ... al acercarse Sam pudo distinguir un agujero en la frente, le habían pegado un tiro. Este hombre llevaba unos 20 minutos muerto.

[Andromeda]

Sam comenzó a temblar -temía verse implicado en una situación difícil-, pero Ivanovich logró controlarlo. Buscaron a las chicas por todo el Victoria, hasta que dieron con ellas en una pequeña habitación. Las tres bebían alegremente: Hyp, un whisky, Cein, el tequila que le había regalado Andrómeda, y ella misma se iniciaba -a instancias de la más bella- con un vodka, que era lo que prefería su amado.
BML también hacía de las suyas y ya había ingerido varias latas de cerveza.

Antes de que sucediera otra cosa, los guapos señores manifestaron a las damas la urgencia de abandonar el lugar. Ivanovich las llevaría a un sitio seguro para a continuación partir a Finlandia, a una misión secreta (poechito ). Tal abandono no resultó agradable a las tres mujeres, y menos aún a Andrómeda, quien sospechaba que bajo la máscara del deber se encontraba un fin más placentero. Y es que a ella, en ficción o realidad, le hacían falta sus letras.

Sam decidió permanecer con ellas, y en vistas de que nadie metía en orden el asunto, se propuso al fin esclarecer un poco los sucesos y dilucidar lo que vendría a continuación, siempre con ayuda de la bola de cristal de Hyp, las hierbas mágicas de Andrómeda y la inteligencia de Cein.

NO SE VALE ABANDONAR EL CUENTOOOO!!!

Escribid!!!!

[Ceinwyn]

Sam se encontraba perdido, y después de tantos días, seguía teniendo frio. Curioso ¿Verdad?

En aquel bar y sin demorar más el asunto (6 días ya eran suficientes) tuvo que tomar la decisión más importante de su vida. Era la primera vez que dejaba una misión sin finalizar si partía hacia Finlandia, y si ya tenía problemas, eso podría ser su perdición.

Moranis jamás se lo perdonaría.

Decidió que podía dejar la misión a medias al fin y al cabo, pero jamás se le ocurriría desperdiciar la oportunidad de jugar una partida de Black Jack.

Mientras las esculturales señoritas que lo acompañaban dormían la mega-mona de 6 días alcoholizadas (Andrómeda la dormía sospechosamente cerca de Ivánovich) subió a hablar con el mafioso.


Moranis lo vio entrar, con los labios azules y tiritando, y todas sus intenciones de matarlo cual babosa zarrapastrosa se desvanecieron.

Sam, a modo de saludo, exclamó:

- ¡¿Y esa partida?!
- Vaya, las cartas se las llevó Pat éste fin de semana para que Hypathia le leyera el futuro. Fue tan negro que las echó a la chimenea.
- ¡Maldita sea! ¡Qué cosas tan terribles me pasan- exclamó Sam, apesadumbrado-Bueno, en ese caso, vengo a proponerte algo.
- Dispara, que después de 6 días aquí, esperándote, estoy dispuesto a aceptar cualquier cosa.
- Sé que lo que teníamos entre manos se ha ido al cuerno, pero un pajarito filandés me ha dicho en un idioma muy raro, pero que por mi extrema inteligencia he captado a la perfección, que, a parte de que su compañero el grajo vuela bajo, allí hay grandes posibilidades de dar un buen golpe. ¿Qué me dices?

[moranis]

Pero el único golpe que estaba dispuesto a dar Moranis era en las narices de aqule tipo... nunca le gustó la gente que jugaba con drogas. Y menos aquellos que habían sido drogados bajo sus órdenes.

Las durmientes eran daños colaterales, y ya que estaban en esa seductora situación alguien debía aprovecharla.

Moranis olvidó las narices de Sam y lo empujó hacia las señoritas.

- Veamos qué se te ocure hacer con estas, Casanova...

[Ivanovich]

Ivanovich estaba totalmente perdio, miró a su alrededor con ojos de misa (esto lo he leido en un libro hace poco y me encanta lo ilustrativo que es) y viendo que nadie sabía donde estaba cada cual se fue a una esquina a apuntar un Haiku que tenía en la punta de la lengua.

[Andromeda]

Nadie se atrevia a tocar a las alcoholizadas porque eran unas leonas. Pobre del que se atreviera. Y es que La casa de las bellas durmientes era historia aparte; bastante asfixiante, al menos para Andrómeda, quien prefería el asunto en sus cinco sentidos. Decidió, entre brumas, sentarse al lado de Ivanovich, pedirle un trozo de papel y uno de los lápices que este le había pillado a una dulce niña. A continuación, comenzó a escribir incoherencias.

Por otro lado, Sam se vio empujado por Moranis y al ver la sensualidad de la doctora Ceinwyn, se vio tentado a aprovechar la visión y la oportunidad que el momento le ofrecía. Ya se transformaría en león para poder dominar a la fiera.

[madison]

subo

[Ivanovich]

Habían pasado 14 años desde aquellos extraños sucesos, una crisis financiera mundial y una pandemia que arrasó el planeta (vale, que casi arrasó el planeta, o que un poco arrasó el planeta, o que un poco afectó al planeta, o a la gente del planeta). Algunos ya peinaban canas, y apenas recordaban nada de todo aquello, un eco casi imperceptible, pero en lo íntimo todo seguía igual, en especial la bella doctora @Ceinwyn ...

[Ceinwyn]

... que aunque seguía teniendo un cuerpo escultural, (no había cogido ni un kilo), ni le habían salido arrugas y ni siquiera tenía un ápice de menos brillo en su frondosa melena (sí, el cuento lo escribo yo y digo lo que me da la gana), ahora, 14 años después, se arrepentía de haber perdido tanto el tiempo con aquel caso y en aquel bar, sin haber sacado conclusiones de ningún tipo, pues el caso no estaba resuelto, y ella seguía compuesta y sin novio.

Hay que ser pardilla pa no rematar.

¿Y Sam? ¿Y los otros? A la mayoría se los ha tragado la tierra. Moranis e Hypatia se esfumaron, @Andromeda por suerte sigue trabajando contra la machista mafia rusa. @BML ha montado un bareto al otro lado de la ciudad al que también ha llamado Victoria, donde de vez en cuando es agradable ahogarse en alcohol.
Y de @Arwen_77 sólo sabemos que Pat la encerró en una torre y ahora se peina y cuida su melena larga para que crezca vigorosa y un príncipe pueda trepar y rescatarla.

Sólo queda, enriquecido por el aprendizaje de la vida, un sereno @Ivanovich que ahora, con la perspectiva del tiempo, es capaz de colocar a todos en su sitio con una sonrisa desde aquel camping en la montaña al que se retiró a encontrar paz y refugio espiritual. Pero hay noches, mientras toca la guitarra al amor de la hoguera y canta "Quién robó pan en la casa de San Juan", que recuerda aquel caso y a aquellas gentes con melancolía, y el cuerpo le pide marcha.

[Arwen_77]

¡Que bueno! No acabé mal yo.