Entrevista a Soledad Galán (El diablo en el cuerpo)

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lucia
Cruela de vil
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Entrevista a Soledad Galán (El diablo en el cuerpo)

Mensaje por lucia »

Entrevista a Soledad Galán (El diablo en el cuerpo)

Imagen1- Usted es periodista, escritora y experta en temas de maternidad y mujer, ¿qué fue lo que le interesó de Isabel II para escribir sobre ella?
Precisamente eso que tú planteas, el hecho de ser especialista en temas que tienen que ver con mujeres y en literatura de mujeres. Me planteé que, siendo Isabel II una de las mujeres más bibliografiadas de España, había contradicciones sobre su vida. Me dí cuenta de que un biógrafo, en un periodo de tiempo, situaba una serie de amantes a Isabel II y otro biógrafo, en el mismo periodo de tiempo, exponía otra serie de amantes o una mixtura de esos amantes. Levi Strauss tiene una frase que dice: El mito es una mentira que siempre conlleva a la verdad. ¿Cuanto hay de mentira de lo que se cuenta de la vida sexual de Doña Isabel?

2- ¿Por qué decidió escribirlo en primera persona?
Planteé el libro como una “venganza” de Isabel II a todos esos rumores. Ahora iba a ser “ella” quien narrase en primera persona sus experiencias y sus secretos más íntimos

3- Se suele hacer mucho hincapié en la vida sexual de Isabel II y a la vez se silencia o se ignora lo que han hecho los reyes que la precedieron y sucedieron.
A Isabel siempre se la recuerda como la reina más puta, cuando los reyes han hecho exactamente lo mismo.
Las referencias que tenemos de ella son acerca de su vida sexual, sin embargo, yo me pregunto: ¿ha cambiado mucho el que una mujer tenga apetencias sexuales? En el siglo XIX se consideraba a la reina como una ninfómana, se veía muy mal y finalmente se la expulsó de la Corte. No obstante, años después llega su hijo, hace exactamente lo mismo y nadie le cuestiona nada. En una parte del libro se ve cómo Isabel II le pregunta al marqués Molins por qué ella es reina madre y está en el exilio cuando su hijo está en su palacio, en su trono y tiene una esposa y muchísimas amantes. Ha hecho lo mismo pero el rasero era muy diferente en el siglo XIX y sigue siendo muy diferente en el siglo XXI.

4- Isabel tuvo numerosos hijos, a pesar de la conocida aversión mutua que sentían la reina y Francisco de Asis y su nula atracción sexual.
Sí, la verdad que en ese aspecto tuvo una vida muy trágica. Tuvo doce hijos y solo vivieron hasta la mayoría de edad cinco. Y más duro aún, ella sobrevivió a prácticamente todos ellos. Cuando murió, solo quedaban con vida la infanta Isabel y Eulalia. A los demás, a todos los enterró.

5- De igual modo que se habla de la activa vida sexual de Isabel, la historiagrafía calla sobre la homosexualidad del regente y su vida sexual.
ImagenPor supuesto. Francisco de Asis también tuvo sus amantes. Él como homosexual tuvo una relación muy abierta con Ramón Meneses y estaba enamorado de Serrano.

El problema de Isabel II es que nació en un siglo en el que a la mujer se la consideraba como el ángel del hogar, es decir, la mujer era algo intocable y, por su condición de mujer, ella no podía sentir placer. Su función es solo procrear y criar a sus hijos. Está en el mundo para ofrecer placer a los hombres, no para sentirlo. Llega un momento en el que Isabel dice “ah, no, yo he descubierto el placer y sé lo que se siente y ahora pienso exigírselo a los hombres con los que me acueste. Quiero sentir placer”. Todo esto, en un mundo en el que la sexualidad era un tabú. Imagínate lo que tuvo que ser para ella el casarse (obligada) con dieciséis años con alguien que jamás le iba a hacer sentir placer. Es más, con alguien que ni siquiera sentiría placer por ella y que rara vez consumarían el matrimonio. Francisco de Asis encima estaba confabulado contra ella para echarla del trono y quedarse él como rey.

6- La novela también muestra la evolución de la propia Isabel. De ese primer encuentro “íntimo” con su marido a su fogosidad con sus amantes. Una Isabel cambiante en una España cambiante.
Yo quería escribir una novela desde el interior y que desde esa intimidad de Isabel II se plasmara el declive de España, el fin de un mundo en el que perdemos todas las colonias. El paso a otro en el que ya se empiezan a esbozar los problemas y asuntos que se desarrollarán en el siglo XX. Para retratar esto elaboré una novela a base de escenas íntimas y amorosas. A medida que se van desarrollando esas relaciones amorosas se descubre cómo el personaje va madurando emocionalmente y también sexualmente. Cómo pasa de esta gran decepción al ver que Paquito será incapaz de proporcionarle placer a descubrir a Serrano, un hombre de cuarenta y seis años, que le va a enseñar todo: la sensualidad, el erotismo, el sexo. Todo ello con la Historia de España de trasfondo.

7- La relación con Serrano fue compleja. Él se aprovecho de ella para manipularla. ¿Cómo fue esa relación?
Fue una relación de poder. Isabel II no fue instruida. Se empeñaron en no educarla para poderla manejar. Ella como mujer puede reinar, pero por su condición no pude gobernar. A medida que Isabel se va entregando a Serrano, él ya está pensando en el poder. Serrano quiere a España y para ello la utiliza. Ya no solo como reina, sino como mujer. Imagínate cómo debe de ser que el amor de tu vida te destroce sentimentalmente y encima sea uno de los adalides de la revolución que te echa de tu casa, de tu país y del trono.

8- Poco instruida e inmadura. Isabel siempre quiso vivir en su burbuja. Mala combinación para un siglo y un reinado tan turbulento.
Es el siglo más convulso. Ahora hay elecciones cada cuatro años, en esa época los ministerios cambiaban cada semana. Si Isabel se enfadaba, mandaba formar Gobierno a otra persona. Los militares tenían gran presencia en la vida política. Serrano era, de hecho, un militar. Muchos de esos cambios se decidían en su alcoba. Ya me entiendes. Hay que comprender también a Isabel, fue un siglo de grandes cambios, pero también de formación de muchos de los males que nos acompañan hasta ahora: clientelismo, cohecho, nepotismo, caciquismo... Por ejemplo, la reina madre, María Cristina, era la dueña de puertos y ferrocarriles. No había negocio que se moviese en España sin que a ella le afectase.

La culpa no es solo de Isabel, a ella no la instruyeron, aunque tampoco se molestó en serlo. Conscientemente la rodearon de una camarilla de clérigos y personajes que preferían mantenerla inculta para dominarla mejor.

9- ¿Fue complicado meterse en la piel de Isabel para escribir el libro en primera persona?
ImagenSí, muy complicado, pero creo que un autor debe de realizar lo mismo que un actor de teatro. Ha de meterse en la piel del personaje, sumergirse en él y actuar, pensar y hablar como ese personaje lo haría. Tenía que sentarme y escribir como Isabel II, si no, no tiene ningún sentido. Fue complicado mantener el tono y la voz narrativa, especialmente ese lenguaje de Isabel II tan descarado e infantil. Mi miedo era que si me pasaba un poquito en ese tono, se podía ir todo al garete. Tuve que encontrar ese punto en el lenguaje en el que cuentas lo justo, se entiende y además engancha.

10- Sí, porque Isabel II fue una persona compleja y con comportamientos contradictorios.
Exacto. Isabel puede estar manteniendo una relación amorosa y tres segundos después va a confesarse. Puede apoyar a un Gobierno hoy y en menos de una semana conspirar para apartarle. Es decir, verse en la piel de alguien así, entenderlo y escribir una novela en primera persona desde el punto de vista de Isabel, pues es complicado, sí.

11- Comienzas a leer el libro y ves que Isabel es una niña [la novela comienza cuando Isabel tiene dieciséis años], pero es que acabas el libro y sigues pensando lo mismo.
Eso es lo que yo le cuestiono a ella. Una cosa es que no te instruyan, otra es que no quieras y te guste seguir siendo inmadura. Ella no hizo nada por aprender, ni tuvo la perspicacia o maldad de enterarse de los asuntos de Estado. Cuando todo se le puso en contra y estalló la Revolución, no supo ni cómo actuar.

12- ¿Hasta qué punto influía la reina en la política?
Es muy interesante la pregunta porque se establecía un doble juego. En primer lugar, los militares y políticos se aprovechaban de Isabel para meterse en su cama, influir sobre ella y conocer sus preferencias. Por otro lado, Isabel también jugaba sus cartas, porque se servía de ellos para poder reinar o gobernar desde donde ella podía, que era en la cama. Es otra forma de poder. Como dije antes, muchos gobiernos surgieron de su alcoba.

13- Utiliza un lenguaje y un enfoque diferente para rebatir a aquellos que dicen que la Historia es aburrida.
Es una novela histórica porque tiene un trasfondo histórico de investigación y documentación durante dos años para reflejar lo que sucedía en la época. Es cierto que he intentado con el lenguaje y la escritura darle una carga de humor, de sexualidad y erotismo que reflejase la época de una manera distinta a los manuales. La Historia no es aburrida, depende de cómo la cuentes. Yo no me inventó el lenguaje con el que habla Isabel. El humor y la retranca castiza están reflejados también en sus cartas. Se lo tomaba todo con mucho humor. El lenguaje de ella es popular, llano, ya que era una persona inculta. Bien es cierto que hago un remix de expresiones o palabras del siglo XIX y del siglo XXI.

Isabel era muy castiza, muy torera, muy bruta; para nada una reina refinada y recatada. Además, por quien estaba rodeada, se movía con un lenguaje de soldados, de militares. Era una reina excesiva y generosa. Para lo bueno y para lo malo. Era una niña en ocasiones egoísta y caprichosa, y así permaneció el resto de su vida

14- ¿Se ha permitido alguna licencia literaria o histórica?
Sí [risas]. Literaria e histórica. Aunque es una novela muy documentada, yo quería plantear con el lector un juego: averiguar, mientras lee el libro, qué es real y qué es ficticio. Muchos piensan que era ficticio que Isabel II tuviera una enfermedad en la piel y no, era real su ictiosis serpentina. Eso si, yo especulo con que el brote fuerte le diese cuando se entera que le van a casar con Paquito [risas]. En el cuadro que pintan de su boda con Francisco de Asis, muestran a una Isabel II exuberante, sin embargo, realmente ella fue a la boda vendada del cuello hasta los tobillos.

15- ¿Tiene pensado escribir otro libro próximamente?
Sí. No me dejan decir nada pero también tendrá un contexto histórico y la protagonista será una mujer.

Entrevista por Noel Corregidor
Nuestra editorial: www.osapolar.es

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