Pascua y naranjas - Manuel Vicent

[Aben Razín]

Estás muy puesta en la bibliografía de Manuel Vicent,

Tengo que confesar que las novelas que he leído de este autor han sido contigo,

[Aben Razín]

@Diavola

Lamento comunicarte que no va a estar en un tiempo en la biblioteca, porque lo han reservado desde otra. De manera que tendrá que esperar un largo tiempo: ha bajado en mi lista de pendientes,

[Diavola]

@Diavola

Lamento comunicarte que no va a estar en un tiempo en la biblioteca, porque lo han reservado desde otra. De manera que tendrá que esperar un largo tiempo: ha bajado en mi lista de pendientes,

Vaya, que pena. Me habría gustado saber tu opinión.
Si más adelante decides leerlo, ya me contarás.

[Aben Razín]

Tengo intención de leerlo y poner en este hilo mis comentarios, pero, por motivos ajenos a mi voluntad, tengo que demorar la lectura,

[Aben Razín]

Espero que esta vez sea la vencida. Ya está liberado en el catálogo de la biblioteca. Creo que, a finales de la semana que viene, podré empezar con la lectura de esta novela, @Diavola

[Diavola]

Espero que esta vez sea la vencida. Ya está liberado en el catálogo de la biblioteca. Creo que, a finales de la semana que viene, podré empezar con la lectura de esta novela, @Diavola

Seguiré tus comentarios a ver que opinas.
En el club de lectura de la biblioteca nos dio mucho juego, no pensaba que el libro daría para tanto y nos quedó una sesión muy interesante.

[Aben Razín]

En el club de lectura de la biblioteca nos dio mucho juego, no pensaba que el libro daría para tanto y nos quedó una sesión muy interesante.

Me alegro: ¡Cuánto me hubiera gustado estar en ese club de lectura!,

[xpache]

“Pascua y naranjas” no es el mejor libro de Vicent, pero sí intuimos ya al narrador de maravillas posteriores como “Tranvía a la Malvarrosa”, “Son de mar” o “León de ojos verdes”.
La novela nos narra la vida de diferentes personajes en el periodo que va desde domingo de Ramos al viernes santo, a capítulo por día.
Así vemos los contrastes que se dieron el los pueblos de costa en los años sesenta del pasado siglo, en los que convivían atractivas turistas llegadas de la capital o del extranjero con la España profunda que aun no se había limpiado el polvo de los bombardeos de la guerra civil. En ocasiones recuerda al Cela del tremendismo, sobre todo en las escenas de los pobres y gitanos o a “El Jarama” de Ferlosio, pero, como digo, se intuye ya esa prosa de los sentidos que tan bien desarrollaría Vicent a lo largo de su carrera.
La novela peca, a mi juicio, de tener un exceso de personajes que, debido a la brevedad del texto, quedan solo perfilados superficialmente.

[Aben Razín]

Coincide plenamente, @xpache con los comentarios de @Diavola e incluso lo que afirmas de la cantidad de personajes, pero haré un poder para hacerme con este Premio Alfaguara 1966. Con Manuel Vicent, he tenido excelentes encuentros con sus novelas -algunas en pequeño MC con Diavola, -.

Aunque es pequeña, por el número de páginas, estoy esperando con ganas la lectura de su narrativa tan mediterránea,

Aquí dejaré mis comentarios,

[Diavola]

Si que coincidimos sobre esta novela @xpache
A ver si @Aben Razín opina lo mismo que nosotros

[Aben Razín]

Espero, en breve, responder a vuestras expectativas,

[Aben Razín]

Miércoles Santo.

En un primer momento, estoy bastante de acuerdo con el comentario de @xpache y con las apreciaciones de @Diavola en el sentido que nos encontramos con una pléyade de personajes que pueden descentrarnos en la lectura de la novela. Sin embargo, si lo vemos desde un punto de vista global, en el fondo, la vida que se nos abre es eso: montón de personas que viven a nuestro alrededor con sus gozos y sombras, alegrías y miserias.

Y, todo esto, visto desde una población costera del Levante español a veinticinco años de la finalización de una contienda fratricida que sigue marcando la sociedad de esa época en muchas vertientes. Por lo tanto, nada nos puede sorprender cuando Manuel Vicent va saltando de una historia a otra para no dejar de lado a ninguno de los habitantes de esas páginas. En ese sentido, sin querer ir más lejos, lo consigue de manera prodigiosa con una prosa muy profunda y certera, incluso llena de matices.

Por todo ello, sigo esperando cuál es el resultado de tanto ir y venir que me tiene atrapado. Eso sí, pienso que, de todas las que he leído, no es su mejor novela, pero también era de las primeras,

Sigo leyendo,

[Aben Razín]

@Diavola

Terminado.

Me ha durado una Semana Santa y, bajo mi criterio lector, es una obra primera o primeriza que contiene muchos elementos posteriores de la narrativa de este autor -en algunos pasajes, me recuerda Tranvía a la Malvarrosa-, pero sin explotar la evolución psicológica de los personajes, como en Son de mar. No obstante, sin acercarse mucho al realismo social de aquella época, podemos ver un retrato aproximado y fiel de un pueblo levantino en medio de una Semana Santa tan religiosa, como la de esos tiempos.

Por todo esto, no nos tiene que extrañar la cantidad de personajes y actos que se van sucediendo por las páginas de las novelas. ¿Acaso un pueblo no tenía tantas circunstancias en tan poco tiempo?.

Lo que es evidente es que Manuel Vicent no tiene piedad con alguno de los personajes que circulan por las páginas de esta obra y los deja en mal lugar; otros, por contra, los salva, incluso al cura le ofrece el beneficio de la duda. Algo de todo debía de pasar en esos sitios y no nos tiene que extrañar: la misión del escritor es describir para que nos hagamos una idea y un retrato veraz.

En ese sentido, la novela cumple con creces, así que la quiero recomendar,

Saludos,

[Diavola]

@Diavola

Terminado.

Me ha durado una Semana Santa y, bajo mi criterio lector, es una obra primera o primeriza que contiene muchos elementos posteriores de la narrativa de este autor -en algunos pasajes, me recuerda Tranvía a la Malvarrosa-, pero sin explotar la evolución psicológica de los personajes, como en Son de mar. No obstante, sin acercarse mucho al realismo social de aquella época, podemos ver un retrato aproximado y fiel de un pueblo levantino en medio de una Semana Santa tan religiosa, como la de esos tiempos.

Por todo esto, no nos tiene que extrañar la cantidad de personajes y actos que se van sucediendo por las páginas de las novelas. ¿Acaso un pueblo no tenía tantas circunstancias en tan poco tiempo?.

Lo que es evidente es que Manuel Vicent no tiene piedad con alguno de los personajes que circulan por las páginas de esta obra y los deja en mal lugar; otros, por contra, los salva, incluso al cura le ofrece el beneficio de la duda. Algo de todo debía de pasar en esos sitios y no nos tiene que extrañar: la misión del escritor es describir para que nos hagamos una idea y un retrato veraz.

En ese sentido, la novela cumple con creces, así que la quiero recomendar,

Saludos,

Perdona, lo acabo de leer ahora.
Coincido en casi todo contigo y me alegro que te haya gustado.
En lo que no coincido es en recomendarla. Manuel Vicent tiene libros mucho mejores. Como tu dices, esta es su primera novela y se nota, aunque su prosa es prometedora.

[Aben Razín]

En lo que no coincido es en recomendarla. Manuel Vicent tiene libros mucho mejores. Como tu dices, esta es su primera novela y se nota, aunque su prosa es prometedora.

La recomendaría para ver la evolución de la narrativa de Manuel Vicent. Como bien dices, estoy de acuerdo, Tranvía a la Malvarrosa es mucho mejor por la manera de cómo están perfilados los personajes o el manejo de la nostalgia, pero, teniendo en cuenta el año de la edición, es interesante.

En el fondo, cuando una novela, como ha sido ésta, me ha producido dentro de mí una reacción emotiva, tiendo a recomendarla y algunas escenas, así como el ambiente que describe de esas semanas santas de finales de los sesenta, me han traído ciertas sensaciones olvidadas.