jilguero escribió: ↑19 Feb 2022 11:23
En la parte que transcurre en Cuba hay más acontecimientos y la prosa es más poética; mientras que en la que transcurre en Paris, abundan descripciones de pinturas y su interpretación y hay momentos en los que la prosa es algo menos barroca.
Recuerda que en el miniclub de
Paradiso nos enteramos de que Lezama escribía dejándose llevar por el ritmo de su respiración de asmático y que eso influía en la puntuación y en el largo de las oraciones _imagina tú el descalabro gramatical en el momento de una crisis de asma muy fuerte
_. Pero recuerda que también Lezama era más o era menos poético en su prosa de acuerdo a su estado de ánimo, y por el mismo motivo solía ser más o ser menos complejo en la escritura. Lo que ahora no recuerdo si lo de ser más poético era cuando se sentía bien o cuando se sentía mal. Tampoco recuerdo si lo de más complejo era cuando estaba de mejor humor o cuando tenía el día malo. Bueno, da lo mismo.
jilguero escribió: ↑19 Feb 2022 11:23
Arrastrado, lo sacaron de la casa, cuando llegaron a la linde de la granja, vaciaron sus revólveres sobre el adolescente que abría los ojos desmesuradamente y que aún después de muerto abría más y que todavía en el recuerdo los abre más y más como si el pasaje entero se hubiera detenido para ir entrando por sus ojos, en la eternidad de la mirada que rompió la cárcel de sus párpados.
Ese fragmento que has citado me horroriza. Lo visualizo y me resulta terrible que algo así pueda ocurrir también en la realidad. De hecho es algo que sucede, y por ello es que me duele tanto imaginar esa expresión de los ojos tan abiertos del adolescente y de cómo en el recuerdo de otros luego se ven más abiertos. Y hay algo muy interesante: eso de "
como si el pasaje entero se hubiera detenido para ir entrando por sus ojos". Seguramente eso se refiere propiamente a ese
pasaje como parte del texto de la novela, y tiene que ver con el hecho de que en
Oppiano Licario los personajes están como conscientes de ser parte de una historia que se narra; incluso ellos comentan acerca de las
interrupciones que tienen las historias secundarias en un momento dado, y los personajes también hablan de la
cantidad novelable.
jilguero escribió: ↑19 Feb 2022 11:23
Resumiendo: por un lado me ha gustado volverme a enfrentar a la prosa poética del Lezama y conocer la pintura de El Aduanero y de Limbourg; por otro, me quedo con la sensación de que hago una lectura superficial y se me escapa mucho del trasfondo último (la intención de Lezama).
Mija, claro que te queda esa sensación de que haces una lectura superficial y de que mucho se te escapa. No te das cuenta de que a Lezama le encantaba que el lector se quedara con el complejo de ser un retardado mental?
Y me alegra que te haya agradado este reencuentro con la prosa poética lezamiana. Yo me siento lo mismo desde ya, cuando solo me he leído el texto crítico de Santí y apenas estoy a medias en el prólogo, y cuando del texto de
Oppiano Licario solo me ha llegado lo que tú citas y algunas líneas que por osadía me había leído desde que el libro me cayó en las manos. Que, como cabe suponer, me cayó en las manos porque lo pagué y no por arte de magia.
jilguero, como puedes ver, aún no he comenzado el primer capítulo. Y no he podido porque he estado enredado y ni siquiera he logrado acabar el prólogo. De modo que también puedes ver que no cumplí con eso de no leerme tu comentario hasta después de yo terminar el primer capítulo. Creo que cuando te dije eso debí poner el emoticono del guiño para poder expresar mejor que en parte era en broma _digo "en parte" porque realmente debe ser así y porque yo no tengo a menos leerme comentarios y reseñas referentes a un libro antes de empezarlo, y mucho menos cuando el libro es de un autor como Lezama, que no se digiere fácil ni aunque te lo den molido_. Y creo que al final lo que has comentado me viene de maravillas para poder leerme
un poco menos lento el primer capítulo y ponerme al día pronto, de manera que no me puedas dejar a distancia.