Gracias a todos por comentar y por las visitas de cortesía de después
En la idea original, el psiquiatra no le cuenta su vida al paciente, pensaba hacer que éste se visitara y hacer real el viaje en el tiempo, que inventase la máquina, después de hacer creer al lector que estaba loco. La idea evolucionó y se volvió más ambiciosa: quería crear una historia en la que el final no se revelase, pero fuera cual fuese la elección del lector (está loco, o no lo está y realmente inventará la máquina del tiempo), hubiera pruebas contundentes e irrefutables que lo avalasen. Los dos finales son buenos y razonables dados los hechos y los argumentos de ambos personajes.
Mi preferido: hay viaje en el tiempo, aquí:
La línea recta que describen sus labios se torna ligeramente curva. Ese brillo en sus ojos
Esta vez no hay más, Isma
No deja de parecerme curioso lo inverosímil que nos parece a todos que un psiquiatra le cuente cosas a un paciente. ¿Cómo sabemos que no lo hacen? Yo no he visitado a ninguno, y de haberlo necesitado, dadas las circunstacias, lo que pudiera contar de él no tendría mucha credibilidad
Aún en el caso de conocer a los suficientes psiquiatras como para establecer un modus operandi, supongo que no se dará el caso de ser la única profesión del mundo exenta de incompetentes
Es solo como curiosidad
Y para terminar, Raoul me recomendó el primer capítulo de un libro en su comentario: me lo estoy leyendo, el libro entero
Muchas gracias a todos