Manel2010 escribió: ↑22 Nov 2020 01:29
jose2v escribió: ↑22 Nov 2020 01:27
Manel2010 escribió: ↑21 Nov 2020 22:01
Claro que te sabes palabras
Hola=hola
Adeu=adios
Casa=casa
Etc
Otra cosa es mantener una conversación normal cuando uno habla
@SUTE no exageris collons que després et diuen que exageres. Et fots a dir que hi ha gent que no té ni idea de català i aquí et diuen que això no és així. Intenta no exagerar em sents? Deu n’hi do, n’hi ha per llogar-hi cadires, valga’m déu...no saps que això de parlar català és bufar i fer ampolles? Aquí en aquest foro no ho fem però podríem. Pren nota please
Please desentona en el párrafo. Y tanto como hacer ampollas es estimar en demasía una lengua entre tantas. Pero si sirve para viajar, pues buena es.
Ya tengo claro que lengua usar cuando viajo y sobretodo cuando viajo por trabajo. Y el catalan seguro que no es, pero el castellano normalmente tampoco
Bueno, también pasa con el neerlandes, o el flamenco.
Mira a Petrarca. Parece ser que también era bilingüe.
Wiki dixit.
Petrarca fue autor también de una ingente obra en latín, mucho más voluminosa y no menos influyente que su obra en
toscano. Dentro de la obra latina revisten especial importancia, por diversos conceptos, el poema épico Africa (que canta en hexámetros latinos las hazañas del conquistador romano Escipión el Africano) y una colección de biografías de personajes ilustres titulada De viris illustribus. Otras obras latinas son: Bucolicum carmen, un conjunto de doce églogas de estilo virgiliano; una colección de epístolas en verso titulada Epystole; un elogio de la vida retirada, De vita solitaria; y Secretum, un diálogo imaginario entre un personaje llamado Franciscus (evidente réplica de sí mismo) y San Agustín, entre varias más.
Los poemas del Cancionero fueron escritos en
italiano: se trata de una colección de más de trescientos sonetos y otros poemas (canciones, sextinas, baladas y madrigales), la mayoría de los cuales revelan la historia de su pasión por Laura y los avatares y estados espirituales y emocionales por los que atravesó, incluso después de la muerte de su amada, cuando su recuerdo la transforma en un ángel (donna angelicata) que intercede a Dios por él para transformar su pecaminoso amor profano en amor divino a la sabiduría y la moral. Se puede dividir en dos partes, coincidiendo con la muerte de su amada en la peste negra de 1348, cuando el autor da un giro a su vida tras las vanidades juveniles para profundizar en valores espirituales. Su creación final se convierte en palinodia de la inicial.[3] En la obra se intercalan algunos versos dedicados a amigos y a otros temas, para marcar como miliarios la cronología de esa historia, así como otras composiciones que tienen la función de romper la monotonía métrica del conjunto.