Rodian escribió: ↑15 May 2022 23:34
En lo personal creo que jamás he robado uno (en formato físico)... Bueno, sí, sólo una vez, pero porque quien me lo prestó era una muy buena amiga y me lo había recomendado mucho, y como no quería decepcionarla dándole mi (no muy favorable) opinión me inventé que lo había dejado olvidado un día en la facultad cuando recién lo estaba empezando
Eso no es exactamente "robar".
Los libros deben ser robados de manera tal que no admitan la menor sospecha o posible incriminación, y —mucho menos— cualquier clase de reclamo.
El ladrón de libros debe actuar de manera profesional, no como un simple aficionado:
1) Una vez detectado el ejemplar, no hay que volver a mirarlo. La codicia es muy delatora.
2) Crear una acción distractora que permita pasar cerca del objeto como si fuera algo natural.
3) No apropiarse del tesoro a último momento, para no asociar la ausencia del ladrón con el robo.
4) Asegurarse de que no hay otro delincuente que pueda competir por el mismo premio. Hay gente sin escrúpulos.
5) Elegir bien la época del año. En invierno es mucho más fácil soplarse un ejemplar: la ropa ayuda mucho.
6) No reírse. El placer del robo se acrecienta cuando supone un riesgo, pero soltar una risita puede hacer fracasar el plan mejor elaborado.
7) En ningún caso pegar el golpe y salir corriendo. Ante todo, mantener la dignidad, que somos ladrones decentes.
8 El arrepentimiento provoca urticarias y piorrea persistente. Además, existe la posibilidad no remota de ser sorprendido en el mismo acto de la devolución, y a ver qué explicaciones se inventan.
A disfrutar, que el río está lleno de peces.
Marcelo