El bujío de Santa Catalina 2 (Bordeando la realidad)

[Gretogarbo]

Este fragmento de ammonites pesa un montón y el animal entero tenía que ser enorme, puesto que esto es solo una parte de una de sus vueltas.

¡Qué barbaridad!

[jilguero]

Este fragmento de ammonites pesa un montón y el animal entero tenía que ser enorme, puesto que esto es solo una parte de una de sus vueltas.

¡Qué barbaridad!

Pues menos mal que no me encontré uno de este otro tamaño. Aunque mi fragmento podría ser de una de las espiras interiores de uno así.

Tengo que leer algo sobre la formación de las montañas de esa zona, pues es increíble la cantidad de fósiles que hay.

[Gretogarbo]

Pues menos mal que no me encontré uno de este otro tamaño.

Dentro de ese amonite entrarían varias personas, jilguero.

Tengo que leer algo sobre la formación de las montañas de esa zona, pues es increíble la cantidad de fósiles que hay.

El Monasterio de Montesclaros está en Picos de Europa, ¿verdad? Si es así, supongo que se formaron por elevación del sedimento marino, arrastrando esos fósiles.

[jilguero]

Dentro de ese amonite entrarían varias personas, jilguero.

Además cada persona con su cámara particular, pues estaban separados por septos internos. Eso sí, un poco incómoda la servidumbre de paso por los "golletes sifonales" de los que estuvieran más afuera y un tanto claustrofóbicos los más internos...

El Monasterio de Montesclaros está en Picos de Europa, ¿verdad? Si es así, supongo que se formaron por elevación del sedimento marino, arrastrando esos fósiles.

Está en sus estribaciones sureñas, pero está cerca de Fontibre y del Pico Tres Mares, llamado así porque en la única cumbre de España que vierte, por sus distintas laderas, el agua hacia los tres mares penisulares: el agua de su ladera sur va al Pisuerga (afluente del Duero, Atlántico), la de su ladera oeste va al Nansa (mar Cantábrico) y la norte vierte hacía el Híjar-Ebro (Mediterráneo).

Pero sí, tienes razón respecto al origen de sus fósiles. Mira lo que dice aquí de la Cordillera Cantábrica en general: Son una serie de cadenas montañosas situadas entre los macizos variscos asturiano y pirenaico. Sus rocas proceden del depósito de potentes espesores de sedimentos acumulados en una cuenca marina muy subsidente durante el Mesozoico que fueron plegados y elevados durante la Orogenia Alpina. Los primeros movimientos de la Orogenia Alpina se iniciaron en el Cretácico terminal, hace unos 70 millones de años, y continuaron durante el Paleógeno con una regresión marina generalizada y sedimentación en medios continentales -fluviales y lacustres.

[Gretogarbo]

... septos internos.

Oye, ¿y qué función tienen esos septos?

... Pico Tres Mares, llamado así porque en la única cumbre de España que vierte, por sus distintas laderas, el agua hacia los tres mares penisulares...

Desconocía ese hecho. Muy interesante.

[jilguero]

Aunque hoy, Cata, puede que tengas ahí un bonito cielo, te diré que aquí, tras una amanecida lluviosa y tristona, tenemos un cielo que le intenta hacer la competencia al mar y, con la sombra de sus nubes, cambia su glauco por azul antes de tiempo; pero lo que consigue con ese cambio prematuro, es embellecerlo más, si cabe.

Mar y cielo.jpg

Es una pena que en la foto no puedas apreciarlo, pero te diré que tras la rompiente blanca por la espuma, el mar está hoy también glauco hasta casi el horizonte, donde aparece la usual franja azul marino de las aguas más profundas y lejanas. En la foto, sin embargo, unas nubes hacen sombra sobre el agua y tornan estas en un azul intenso antes de tiempo.

Te la pongo un poco aumentada a ver si así logras ver la verdadera franja azul de siempre, estrecha y muy en lontananza, justo antes de que el mar y el cielo se junten. De hecho, hoy es tan azul la banda media, que la otra da la sensación de volver a ser de una tonalidad más bien glauca.

Detalle.jpg

Y como verás también hay un carguero en el horizonte camino de sabe Dios dónde. Creo que ya te lo he dicho otras veces. Contemplar ahora estos barcos me hace consciente del paso de los años, de cómo el tiempo se ha ido llevando mis bríos, que no mi valentía, pues esa no la tuve nunca.

Cuando llegué a Cádiz, muy pobre de haberes materiales, pero muy rica de vida por delante, me gustaba tumbarme en los espigones y, con la cabeza girada hacia el lado, contemplar la salida de los cargueros por la bocana de la bahía. Mientras los veía pasar sentía por mi interior un cosquilleo muy raro, como si yo pensara que algún día me iba a atrever a dar el paso adelante, a ir a bordo de uno de esos cargueros. Y es que (esto creo que no te lo he dicho nunca) además de la vida aislada en los conventos de clausura, también me atrae la vida a bordo de los barcos, que es una especie de viajar con la casa a cuestas.

Han pasado los años y, aunque ya son muchas menos las veces que me tumbo en un espigón a verlos pasar, cuando los veo como hoy, por casualidad, mientras me deleito con los colores del mar, ya no siento ese cosquilleo, sino solo una mijita de nostalgia y una gran serenidad. Una serenidad que sin dejar de ser placentera (la serenidad siempre lo es), tiene también un regustillo agridulce, hecho a partes iguales de conformidad y de derrota.

Y aquí te dejo esta pieza de Bach que expresa bien esa mezcla.

Enlace

[jilguero]

... septos internos.

Oye, ¿y qué función tienen esos septos?

Tendría que mirarlo para asegurarme pero estoy hambrienta. No te fíes mucho, pues, pero creo que en esas cámaras almacenaba gas y era su manera de flotar en el agua y de poder subir o bajar, como la vejiga natatoria de los peces.

[Gretogarbo]

Aunque hoy, Cata,...

Muy bonito lo que le cuentas a Cata, jilguero, y cómo se lo cuentas.

... estoy hambrienta. No te fíes mucho, pues, pero creo que en esas cámaras almacenaba gas y era su manera de flotar en el agua y de poder subir o bajar, como la vejiga natatoria de los peces.

¡Pues a comer, ya!

[jilguero]

¡Pues a comer, ya!

Eso hice, Greto, y no veas qué bien me han sabido las lentejitas (este diminutivo no es andaluz, sino que hace alusión a su tamaño)

Muy bonito lo que le cuentas a Cata, jilguero, y cómo se lo cuentas.

Y tú, Greto, ¿no sientes (o sentiste) nunca la llamada del pato silvestre?

Hago alusión a este texto de Saint-Exupery (Tierra de hombres, ), que ya he citado con anterioridad: "Cuando en época de migraciones pasan los patos salvajes, provocan extrañas mareas en los territorios que sobrevuelan. Los patos domésticos, atraídos por el amplio vuelo triangular, intentan un torpe salto. El canto silvestre ha avivado en ellos un rescoldo salvaje inefable. Y los patos de granja han transformado durante un minuto en aves de paso. En su cabecita dura llena de imágenes de charcas, de gusanos, de gallineros, aparecen las llanuras continentales y el amor por los vientos y por la geografía del mar. El animal no sabía que su cerebro era suficientemente vasto como para contener tantas maravillas, pero ahí está aleteando, despreciando el grano, despreciando los gusanos, queriendo llegar a ser un pato salvaje.”.

[Tolomew Dewhust]

Leí hace tiempo una cita que hoy me viene a la mente: La vida no debería ser un viaje hacia la tumba con la intención de llegar a salvo con un cuerpo bonito y bien conservado, sino más bien llegar derrapando de lado, entre una nube de humo, completamente desgastado y destrozado, y proclamar en voz alta: ¡Uf! ¡Vaya viajecito! (Hunter S. Thompson).

Saludos a todos.

[Gretogarbo]

Y tú, Greto, ¿no sientes (o sentiste) nunca la llamada del pato silvestre?

Claro que fui pato silvestre. Como tú, por hecho, no sé si también por edad, volé de mi corral con 18 años y nunca más regresé salvo para hacer alguna que otra visita a los que allí seguían.

Oye, jilguero, ¿y será cierto eso de que los patos domésticos sienten el impulso de levantar el vuelo cuando ven volar a los patos salvajes en formación?

La vida no debería ser un viaje hacia la tumba con la intención de llegar a salvo con un cuerpo bonito y bien conservado, sino más bien llegar derrapando de lado, entre una nube de humo, completamente desgastado y destrozado, y proclamar en voz alta: ¡Uf! ¡Vaya viajecito! (Hunter S. Thompson).

Desgastados llegamos todos, Tolomew Dewhust. Habrá que evitar llegar destrozados.

[jilguero]

Buenos días, Cata, volvemos a tener un día lluvioso y gris, como si el invierno no estuviera dispuesto a cederle el testigo tan pronto a la primavera que, por otro lado, ya asoma las orejas por todas partes. Así que hoy mejor hacemos vida de interior y le contesto a Greto y a Catulo.

¿y será cierto eso de que los patos domésticos sienten el impulso de levantar el vuelo cuando ven volar a los patos salvajes en formación?

La forma que tenía Saint-Exupéry de decirlo me sonaba a que era un dato real. Piensa que los patos domésticos son de la misma especie que el ánade real (Anas platyrhynchos).

No hace tanto tiempo, desde el punto de vista biológico, que se domesticaron y de hecho todavía se pueden hibridar con los salvajes y dar crías fértiles. Por eso que el canto de los patos en migración ("El canto silvestre ha avivado en ellos un rescoldo salvaje inefable", S-E dixit) despierte en ellos una conducta instintiva no me resulta improbable. Los patos mientras migran parpean para mantenerse unidos y no perderse. Puede que evolutivamente ese parpear concreto sea como una orden de agregarse y los domésticos (ya suelen volar poco) aletean respondiendo a ese instinto. Nosotros mismos, tenemos instintos atávicos que no usamos pero que en ciertas situaciones afloran.

Pero todo esto, Greto, son elucubraciones mías, pues no lo sé con certeza.

Leí hace tiempo una cita que hoy me viene a la mente: La vida no debería ser un viaje hacia la tumba con la intención de llegar a salvo con un cuerpo bonito y bien conservado, sino más bien llegar derrapando de lado, entre una nube de humo, completamente desgastado y destrozado, y proclamar en voz alta: ¡Uf! ¡Vaya viajecito! (Hunter S. Thompson).

La cuestión es si todos tenemos las características para disfrutar un camino que nos haga llegar al final derrapando. Yo por eso he optado por pedir nuevas vidas, porque la opción que se elija para vivir la vida a tope tiene que estar acorde con las capacidades personales; amén de que, a quienes nos gusta la vida con todas sus luces y sus sombras, renunciar a la propia vida, a la ya vivida, es pedirnos demasiado. Recuerdo, casualmente, que el día que estuve hablando con Cata para usar su vida como esqueleto de la Hagiografía de nuestra santa bujiana, en un momento dado le pregunté que, si volviera a nacer, qué le gustaría ser: reflexionó durante unos segundos y luego me dijo que volvería hacer lo mismo, que no se podía imaginar la vida sin Viento y sin vosotros. Soy también de su misma opinión, ¿cómo renunciar a lo vivido? Cómo renunciar a esos días azules y demorados de la infancia, o a ese amanecer junto a la caldera de Thíra en Santorini, o a ese olor a alhucema, o a esa Habitación 413, o al piano de de mi vecino, o a ese primer encuentro con el Niño del Tirachinas, o a la repentina aparición de Claudia, o esa cálida voz azul nazareno... Sí, ¿cómo se puede renunciar a todo esto y a tantas otras cosas vividas? O dicho de otra forma, ¿cómo se puede renunciar a ser quienes somos?

Muy diferente es tener otras oportunidades sucesivas, ya que estoy de acuerdo en lo esencial de lo que dice Hunter, en que hay que vivir y disfrutar del día a día, sin preocuparse de conservarse bien para un mañana que igual ni siquiera existirá. Quizás pensando, como pensaba, el destino debería haberle deparado a él una muerte más temprana (como le ocurrió, por ejemplo, a mi amigo el que murió en el Himalaya) y no permitir que al final llegara tan destrozado que se acabara volando la tapa los sesos. Y creo que a la vida hay que sacarle su jugo, pero la forma de hacerlo puede ser muy variable. Recuerdo algo que se decía en la película Como agua para chocolate (lo decían aplicado al amor, pero que vale igual para la vida). Imaginemos que la vida es una caja de cerillas, podemos disfrutar de la llama que estas nos ofrecen encendiendo la caja de golpe y viviendo la vida como una gran explosión de luz; pero la podemos disfrutar igualmente encendiendo cerilla a cerilla y disfrutando de la luz de cada una de ellas. Hay quienes están hechos para disfrutarla de la primera forma y quienes lo están de la segunda. Eso no quita que el pato doméstico sienta dentro de sí la llamada del pato silvestre que no es y viceversa, como le ocurría a los cormoranes marinos y a Fátima, la gaviota, que cada uno parecía mirar hacia lo que no el correspondía (por cierto, Cata, ya mismo te colgaré la pamplina de esa gaviota anónima que se coló en la foto).

¡Qué rollo he soltado, Cata, a cuenta de la frase que ha citado Catulo! .

Desgastados llegamos todos, Tolomew Dewhust. Habrá que evitar llegar destrozados.

Si se toma "destrozados" en sentido metafórico tiene sentido, como cuando después de una caminata de muchas horas por la sierra llegas a casa con los músculos adoloridos y los pies llenos de ampollas, pero feliz de lo que has visto y sentido. Igual con la vida: no estaría mal llegar al final tan "destrozado" (tan cansado y ahíto) que lo que nos apetezca sea entonar un deep peace.

Enlace

[jose2v]

Buenas, sietecolores, y resto de bujienses.
Solo te escribo para decirte que es una lastima que quitaras lo de fanguito de mis entretelas. Lo veía muy relacionado con una cosa que puse sobre el arte, arte es poner un palo en pie y dad tiempo. Y últimamente estás poniendo plantas que nacen en lugares inhóspitos y de difícil condiciones.

Un fuerte abrazo, y sigue pamplineando tan artísticamente como lo haces.

https://dle.rae.es/?id=RaOp0rz

[luchana]

Que bonito lo que cuentas del mar.
Me trae al recuerdo lo que leí cuando tenia 15 o 16 años, allá mediados años 60. Lo pego aquí.

"A todas sus observaciones respecto al mar, Anastasio añadió dos más aquella tarde: que más que recibir el color del cielo, se diría que es el mar el que presta su color a aquél; porque si azul, es más azul que el cielo; si gris, más gris; si negro, mucho más negro. Y que mirarlo alegra el ánimo al que ya es alegre y no entristece al que ya está triste"

Y es que yo muchas veces que miro el mar me acuerdo de ese pasaje: El cielo esta gris: el mar negro. El cielo esta azul claro, el mar azul intenso.
¿Y sabes que libro es? (Pregunta de trivial)
Edad prohibida, de Torcuato Luca de Tena. ¡Como me marcó!
Y hablando de cargueros, yo vivía cuando era niño delante de la ria de Bilbao y cerca de la fabrica de Altos Hornos, en Baracaldo, y me pasaba horas mirando la ria y los barcos que pasaban.
Vivo en Ibiza desde hace mas de 40 años y paso el charco varias veces al año, y me sigue gustando el viaje. Y pensé estudiar náutica, pero pasar meses sin ver tierra, me asustaba...

[Gretogarbo]

... son elucubraciones mías, pues no lo sé con certeza.

Elucubraciones muy convincentes, jilguero. Gracias.